Todo tiene sus pros y sus contras. En este caso en particular creo que son más las cosas buenas que las malas, pero la realidad es que no es para cualquiera tener como novia a una chica viajera.
Como identificarla
Va a ser la chica que tiene varias capas de tono de piel, siempre pero siempre es una buena idea tomar sol, en donde sea y como sea, por eso se complica tener el bronceado perfecto. Y más allá del bronceado, seguramente no tenga la piel de porcelana, sino algunas marcas por aquí y por allá, todas con una gran historia detrás.
1. La típica salida no va
Osea, esta todo bien con salir a comer, ir al cine y a tomar algo, pero si podemos hacer otro plan mejor. Salir, conocer, aventurarse... a una viajera no la sorprendes con un reloj carísimo. La vas a sorprender llevándola a hacer o a conocer cosas nuevas
2. El dinero es para viajar
Siempre, pero siempre debes de estar preparado para que te avise que sacó un ticket de avión nuevo. Obvio que a veces vas a estar incluido en los viajes (a veces, no siempre). Y si, para eso es el dinero de las viajeras, para viajar, así que olvídate de gastar por todos lados, por que lo único que interesa es gastarlo en viajes.
3. Trabajos aburridos fuera
Si eres de esas personas que se quejan por su trabajo, no intentes salir con una viajera. Las viajeras no tenemos el típico trabajo, buscamos trabajos que nos den libertad para poder recorrer el mundo. Generalmente siempre son trabajos freelance.
4. Vida estructurada
La vida estructurada, toda planificada no va. Así que si sueñas con salir con una viajera y cumplir todo lo estipulado, no lo vas a lograr. Capaz en un viaje decide cambiar de carrera o decide que no quiere vivir más en la ciudad que creció o encontró su lugar en el mundo... hay infinitas razones.
5. Dice lo que piensa
Más si ya viajo sola, si viajó sola olvídate de que sea alguien que se quede callada, que no diga lo que piensa y se quede en el molde.
6. Nunca te va a necesitar
Pongamos el supuesto que es el amor de tu vida, te va a mar con locura y te lo va a demostrar de mil maneras, pero nunca te va a necesitar. Una viajera sabe moverse sola, cocinar, hacer nuevos amigos, mil cosas... es totalmente independiente. Puedes ser el complemento perfecto, pero no el "complemento indispensable".