En circunstancias normales, generalmente hay alrededor de 2.5 millones de peregrinos que visitan las ciudades sauditas de La Meca y Medina para el Hach, pero debido a la pandemia de coronavirus, el gobierno ha prohibido a los musulmanes en el extranjero.
Esto significa que hay tan solo 1,000 personas participando en la ceremonia, que ya viven en Arabia Saudita, en un intento por controlar la propagación del virus.
El ritual de una semana es una obligación única en la vida para todos los musulmanes con la capacidad de ir, razón por la cual había tanta gente en años anteriores.
Los visitantes completarían el Hach de pie hombro con hombro, los padres llevarían a los niños sobre sus espaldas y otros empujarían a sus padres o parientes mayores en sillas de ruedas.
Sin embargo, este año, por primera vez en la historia de Arabia Saudita, el gobierno prohibió a los musulmanes ingresar al reino desde el extranjero para realizar el Hach.
Según Sky News, los peregrinos fueron seleccionados después de presentar su solicitud a través de un portal en línea y se les exigió que tuvieran entre 20 y 50 años de edad, sin enfermedades terminales y sin síntomas del virus. También se dio preferencia a aquellos que no habían realizado el Hach antes.
Se les realizó una prueba de detección de coronavirus y se les entregaron pulseras que se conectaban a sus teléfonos para controlar cualquier movimiento y tuvieron que aislarse en su casa y en sus habitaciones de hotel en La Meca antes del inicio del viaje.
También tendrán que poner en cuarentena durante una semana después de que el Hach concluya el domingo (2 de agosto).
El peregrino emiratí Abdullah al-Kathiri dijo en un video publicado por el ministerio de medios saudita: «No esperaba, entre millones de musulmanes, ser bendecido con aprobación. Es un sentimiento indescriptible… especialmente porque es mi primera peregrinación».
Kehinde Qasim Yusuf, un peregrino australiano en el Hach de este año, agregó: «Esta es una situación muy especial en la que nos encontramos. También tenemos el privilegio de realizar el Hach en nombre de todo el mundo musulmán».
Muhammad Saleh bin Taher Benten, ministro saudí de Hayy y Umrah, dijo: «El Hach en 2020 es una peregrinación verdaderamente excepcional en todas las medidas».
«Debido a las circunstancias excepcionales de salud global causadas por la pandemia de coronavirus, se han aplicado estrictas medidas de precaución para garantizar un Hach saludable para todos los peregrinos».