Cuando viajamos, siempre buscamos las curiosidades y secretos que nadie sabe y que sentimos que, al descubrirlos, conocemos una parte más del sitio en que nos encontramos. Este post está dedicado a aquellos viajeros que “miran más allá” y disfrutan de investigar esos sitios inusuales: un recorrido por estatuas escondidas en el mundo, esas que están allí por una razón y que esperan ser descubiertas por los más curiosos.
1. Los gigantes olvidados, Copenhague, Dinamarca
Dinamarca es un país donde las historias de duendes y gigantes son “moneda corriente”. En los bosques de Hill Top Trine, los viajeros pueden caminar y toparse con gigantes hechos en madera, interactuando con el ambiente y creados con materiales 100% reciclados.
El artista Thomas Dambo, utilizó madera reciclada de más de 600 pallets, una cabaña y una cerca vieja para crear un grupo escultórico único en el mundo junto a comunidades locales que apoyaron y colaboraron en la idea. Al lado de un rio o “sosteniendo” un puente, las esculturas de los gigantes buscan ser propulsoras para que el resto de la población comience a aprovechar los materiales reciclados para distintos fines.
2. Buda en las raíces, Ayutthaya, Tailandia
Muy próximo a la vorágine de la ciudad de Bangkok, se encuentran las míticas ruinas de Ayutthaya, un sitio arqueológico sumamente recomendable para aprovechar durante la estadía en la capital tailandesa. Ayutthaya, lo que fue la capital del antiguo reino Siam entre los años 1350 y 1767 es, hoy en día, un sitio en ruinas perfectamente bien conservadas y visitado por miles de turistas al año.
En el mismo sitio arqueológico, se encuentra un pequeño pero muy interesante tesoro, el llamado “buda en las raíces”, siendo la estatua de una cabeza de buda entrelazada en las raíces de una enorme higuera. Según las historias, la cabeza quedó “escondida” en el árbol luego que, con el correr de los tiempos, las raíces comenzaran a taparla; aunque hay historias que afirman que los propios tailandeses escondieron la escultura luego de la llegada de los birmanos.
El árbol es sagrado para los budistas quienes se acercan a diario dejando ofrendas.
3. Monumento a Marcel Ayme, París, Francia
Que las estatuas se encuentren escondidas, no quiere decir que tengan que estar en algún sitio remoto o difícil de llegar, muchas de ellas se encuentran tan a la vista que hasta pueden pasar desapercibidas.
En las calles de París, la capital francesa, se encuentra una estatua muy particular, en reconocimiento al escritor francés Marcel Ayme, de extrema popularidad en el país europeo.
La peculiar e inusual estatua es conocida por la población como “hombre caminando a través de la pared” debido a su forma que parece que, literalmente, esté atravesando el muro de piedra. La estatua fue inaugurada en el año 1989 en reconocimiento a la novela del mismo nombre, escrita por Marcel Ayme, ocupando en la creencia de los artistas como una estatua inspiracional.
4. El Järnpojke o El chico de hierro, Estocolmo, Suecia
Creada en el año 1967 por un artista sueco, este pequeño monumento es uno de los más pequeños del mundo, con una estatura de 15 centímetros de altura. Este pequeño monumento se encuentra en patio de una iglesia finlandesa en Estocolmo, cerca del Palacio Real y representa a un niño mirando a la luna.
Los suecos han adquirido tanto cariño por esta pequeña figura que siempre que se pase por su lado, se encontrará al niño con algún abrigo distinto, hecho por los propios habitantes y hasta, en muchas oportunidades, monedas u ofrendas de personas que han pedido deseos.
5. Budas bajo el agua, Lembogan, Indonesia
Ubicado muy próximo a Bali y en camino a las islas de Nusa Penida, en Indonesia, se encuentra una especie de museo bajo el agua, perfectamente ubicados en la lista de estatuas escondidas del mundo porque, literalmente, se encuentran bajo el agua y sin que alguien lo indique, seria imposible encontrarlas.
Ubicadas en la isla de Nusa Cenigan, la más pequeña de las “nusas”, se encuentra el conjunto escultórico de budas hundidos a 5 metros de profundidad de la superficie. La estatua principal mide 2.3 metros y está rodeada por más estatuas de budas algo más pequeñas, formando un templo prácticamente único en el mundo.
Este proyecto comenzó en el año 2003 para fomentar la creación de coral que tan importante es para la vida marina, aunque en los últimos años la cantidad de turistas que visitaban la zona, estaban haciendo el efecto contrario al buscado. Se espera que a medida que corran los años, el proyecto vuelva a funcionar de la manera que funcionaba en sus comienzos.
Claro que las estatuas escondidas están en todo el mundo y es nuestro trabajo como viajeros continuar nuestros recorridos descubriendo los secretos que los distintos sitios tienen guardados para que, en cada viaje, haya algo nuevo por descubrir.
Agradecemos la foto de portada: Chris Alban Hansen