La consigna es clara: este desecho de cerveza que ves acá no es de la playa, aquel envoltorio de helado tampoco. Y la cantidad de colillas de cigarrillos que compiten mano a mano con las huellas de pisadas de quienes visitan un balneario mucho menos…
Es difícil de asumir, porque uno asiste a un espacio como tal en un plan de distención, ocio y entretenimiento. Pero así como el trabajo no es lo habitual de las vacaciones, la basura no es alimento para quienes viven bajo el mar. E insisto, ni siquiera debiera ser de las playas.
Tener que hacer la advertencia jode. Y seguro jode tanto como recibir un mail de la facultad cuando te tomaste vacaciones, o un pedido desesperado de tu jefe porque quien está cubriendo temporalmente la vacante no sabe cómo se hace X cosa. O jode tanto como una discusión boluda con tus amigos sobre quién va a hacerse cargo de lavar toda la vajilla sucia que vienen acumulando.
«Ufff… esto ahora no» seguro pensás de solo imaginar alguno de los tres escenarios anteriores mientras te pasás protector solar por la gamba izquierda o mientras consultás cuál es el after que se ‘pone’ hoy. Bueno, entonces imaginá, por un momento, que cuando alguien se retira de la playa y deja sus residuos en ella, muchas de las especies que conforman el ecosistema marino lanzan una catarata de puteadas y dicen «Ufff… esto ahora no«.
En definitiva, aquello no es de la playa. Pero nadie lo marca ni lo sanciona y, como cuando ocurre en otros aspectos de la vida, donde no hay límites, hacemos la que se nos canta. ¿Hace falta que alguien tenga que decirte acá también ‘che amigo, date cuenta’? ¿No es acaso esta la relación de verano más tóxica que podemos experimentar?
Para eso, es necesario que lo veas. Clarito, con tus ojos: #EstoNoEsDeLaPlaya.
Esta nueva dinámica de participación para problematizar el impacto de la acción humana en las playas y fomentar la interacción en redes sociales haciendo mención de este tema consiste en juntar cualquier tipo de residuo, ya sea una bolsa, una botella, una lata, subirlo a redes sociales y sumar el hashtag #EstoNoEsDeLaPlaya y arrobar a @nicomarinb, principal promotor de esta iniciativa.
«La idea es visibilizar la problemática de la contaminación de residuos en las playas de Argentina y el mundo. Luego de la foto, el siguiente paso es tirarlo en el cesto correspondiente»
No es la primera vez que este joven argentino revoluciona las redes a partir de la creación de un reto viral capaz de promover el cuidado del medio ambiente.
“Yo soy fotógrafo marino de profesión. Siempre estoy promoviendo y acompañando movidas ambientales y de cuidado tanto del medio ambiente como de los océanos también, con lo que sea respecto al agua, a especies en peligro de extinción y demás“, así se describió Nicolás Marín, en una charla con Intriper tras el lanzamiento de la campaña #1BottleChgarette. Surgido a principios del 2020, aquel reto invitaba a las personas a juntar botellas llenas de colillas en las playas para visibilizar la problemática de las colillas de cigarrillo en los espacios públicos.
Pero Nico no está solo en esto. Con el paso de los días va sumando seguidores a esta movida, quienes comparten por redes sociales su colaboración con la causa.
A su vez, ya se han sumaron diferentes personas reconocidas y referentes del cuidado del medio ambiente como el pro surfer Leandro Usuna, el artista marplatense Rusea y también organizaciones y marcas como EcoHouse, Alianza por el clima, Fridays for future, Koshkil, Ledesma Nat, Bioguia, Meraki, Kanalu Wood, LiveSlow, Plástico Cero, Hotel Esperando, Sin Azul No Hay Verde, entre otras marcas reconocidas de Argentina y del mundo.
¿Por qué es importante problematizar la presencia de residuos en playas de Argentina?
Según cifras, Argentina es uno de los países que integran la lista de los 30 países que más basura plástica tiran al mar. En Mar del Plata ésta problemática se incrementa en verano por la gran cantidad de turismo de sol y playa hacia destinos de la Costa Atlántica.
En el país se producen 14 millones de toneladas de basura al año y el 14% de esa cifra corresponde a plásticos. Estudios revelan que, por día, se tiran alrededor de 12 millones de botellas y de ellas solo se recicla un 30%. Tomar conciencia del abuso que se le da a los productos plásticos y generar un cambio es una acción que debemos tomar cuanto antes. No por moda, ni por tendencia, ni por sumarse a un colectivo que nos deja en una parada ‘cool’ de una causa común: necesitamos ser parte justamente por necesidad.
Y es que, por si acaso… si este mundo se jodiera mañana, ¿a dónde irías a buscar un nuevo hogar?
Pd: Querido/a lector/a, si algo de esta nota logró resonar en tu cabeza, este sábado 16 de enero a las 11:00 horas, Nicolás estará junto a la gente de Bioguía organizando una limpieza de playas en Playa Grande, en la ciudad de Mar del Plata, que se va a estar realizando a nivel mundial. ¡Estás invitado/a!