Los residentes de Estados Unidos que hayan recibido todas las dosis de la vacuna contra el COVID-19 pueden viajar por el país sin necesidad de presentar una prueba de coronavirus con resultado negativo ni tener que cumplir con la cuarentena obligatoria, de acuerdo a las nuevas recomendaciones de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Las nuevas recomendaciones realizadas el pasado viernes, 2 de Abril, por una de las instituciones más importantes de Estados Unidos en términos de salud plantean que las personas que hayan recibido las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19, o la única dosis en el caso de la vacuna Johnson & Johnson, pueden viajar de forma doméstica sin tener que realizarse una prueba antes de viajar ni aislarse luego.
Esto se debe a que, según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades, las vacunas utilizadas en el país «son altamente efectivas en proteger a las personas vacunadas contra casos sintomáticos y severos de COVID-19». Además, sostienen que, según la evidencia, las personas vacunadas tienen menos probabilidades de tener una infección asintomática y es potencialmente menos probable que transmitan el virus a otras personas.
De acuerdo a la información publicada, las personas vacunadas que viajen de forma doméstica en Estados Unidos tampoco necesitarán realizarse una prueba de COVID-19 antes de abandonar el país, a menos que se lo soliciten en su destino.
De cualquier forma, recomiendan prestar especial atención a la situación epidemiológica del destino que elijan, principalmente «por la propagación de nuevas variantes y porque el peso de COVID-19 varía globalmente». En este sentido, cabe tener en cuenta que de a poco se van sumando la cantidad de destinos que facilitan el ingreso a turistas vacunados.
Si bien esta nueva recomendación de los Centros de Control y Prevención ofrece facilidades para los viajes de las personas vacunadas, todavía hay ciertas medidas de prevención que tienen que respetar. Entre estas se encuentra el uso de mascarillas/tapabocas en transporte público, aeropuertos y estaciones de trenes. Además, en caso de viajar al exterior, tendrán que realizarse una prueba de coronavirus antes de volver a Estados Unidos.