¿Imaginas pasar una tarde encantadora por la sorprendente ciudad de Londres mientras tomas un café o una bebida azucarada acompañada de algo dulce? Gracias a Walkmisú, un intento de dispenser de tiramisú, te espera un recorrido por Russell Square, una plaza y jardín público en Bloomsbury, convirtiendo a aquella escena en realidad.
Se trata de una cabina telefónica que vende un tentador tiramisú italiano para llevar. El lugar se encuentra muy cerca del British Museum y de la Universidad de Londres, en Russell Square.
Siguiendo la estela de otros puestos que venden café en antiguas cabinas telefónicas -como Amar Café y Kape Barako-, Daniele Benedettini se ha dispuesto a liderar esta iniciativa dándole una vuelta más y ofreciendo, además de bebidas calientes y frías, un postre que animara a dar un paseo por la zona.
A juzgar por las imágenes del lugar, la cabina sigue manteniendo su aspecto clásico, pero lo verdaderamente sorprendente se encuentra en su interior: han tenido que hacer todos los cambios para poder vender café y tiramisú.
Según ha indicado el mismo Benedettini, “el tiramisú se prepara según la receta original, lo que los distingue creo que es el hecho de que hacemos diferentes sabores como: pistacho, limón, coco, nutella, plátano, chocolate y fresa. Tampoco utilizamos colorantes ni conservantes y todos nuestros tiramisús están hechos sin alcohol”.
Lo cierto es que, una visita a Walkmisú puede ser mejor de lo que piensas: además de la tarta italiana, este espacio también vende capuchino, americano, flat white, macchiato, espresso, chocolate caliente, té y refrescos. Y lo más importante: todos los café son importados y tostados en Nápoles.
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