«Al amanecer, dos jaguares invadieron el recinto de los flamencos en Parque Das Aves, junto a Parque Nacional do Iguaçu, y murieron 172 aves«, anunciaron de manera oficial desde Proyecto Jaguares do Iguaçu en su cuenta de Instagram y apenados ciento por ciento por lo ocurrido. Desde Parque Das Aves, santuario y refugio de aves situado en Foz do Iguaçu, Estado de Paraná, Brasil, también replicaron el mensaje y compartieron con su audiencia la decisión de declarar tres días de luto en el lugar.
Proyecto Jaguares do Iguaçu, la organización para la conservación del medio ambiente que enuncia como principal objetivo conservar al jaguar como especie clave para el mantenimiento de la biodiversidad de la región del Parque Nacional Iguaçu, amplió que algunos de los flamencos murieron por ataque directo de los jaguares, otros se vieron víctimas del acontecimiento por el estrés ocasionado.
Asimismo, la fundación también comentó haber identificado a los jaguares, una hembra y su cría, Indira y Aritana, que tiene aproximadamente un año, que viven en el Parque Nacional de Iguazú. Según han indicado, en dicha etapa, las madres están enseñando a sus crías a cazar: «Lo que pasó fue una fatalidad. El Parque das Aves está completamente vallado y los empleados monitorean el perímetro y las áreas internas diariamente, y siguen las pautas de seguridad proporcionadas por nosotros. Aún así, toda la protección y los cuidados no impidieron la entrada de depredadores«.
En 27 años de existencia del Parque das Aves, esto nunca ha sucedido. Hemos recibido muchas preguntas y comentarios sobre el comportamiento del jaguar, algunos con connotaciones extremadamente negativas. Los jaguares son animales salvajes, son carnívoros, excelentes depredadores. Cazan y se alimentan de otros animales. No son crueles. Son jaguares. Se nos pregunta si es seguro visitar los parques. Si, es seguro. Los jaguares siempre han existido en la región y en el Parque Nacional Iguazú, y no hay un solo registro de accidentes con personas en toda la historia.
Projeto Onças do Iguaçu
Los jaguares tienden a alejarse de las personas y buscar refugio en el bosque, que es su hogar y refugio. Una afirmación que surgió en torno a este acontecimiento es que hay un “brote” de jaguares en la región y esto, supuestamente, se ha ocultado para no provocar miedo. Ante los rumores, desde la organización activista sostienen con firmeza: «No tenemos un brote de jaguar. Tenemos una población en peligro de extinción, estimada en 28 animales repartidos en las 185.000 hectáreas del Parque Nacional Iguazú. En realidad, esta es una pequeña cantidad para el área en cuestión».
«En toda la Mata Atlántica solo hay unos 250 jaguares. Tenemos una población en peligro crítico que casi se extinguió en la década de los 90, y que con mucho esfuerzo y dedicación de muchas personas, conservacionistas y vecinos, se ha ido recuperando«.
La noticia ha causado conmoción en la zona al tratarse de una institución, única en el mundo, dedicada a la conservación de las aves del llamado Bosque Atlántico. Para poner en contexto, el predio cuenta con unas 1.500 aves de 150 diferentes especies y, con cerca de 830.000 visitantes por año, siendo la segunda mayor atracción de la ciudad de Foz do Iguazú, después de las cataratas claro.
Por lo pronto, el parque, que fue inaugurado en 1994 y se encuentra dentro de 16 hectáreas de bosque, reabrirá únicamente sus puertas a partir del próximo viernes.