Al menos una mujer perdió la vida y doce personas desaparecieron tras un corrimiento de tierra que arrasó decenas de viviendas en la isla italiana de Isquia, en el golfo de Nápoles, según informó el delegado del Gobierno en Nápoles, Claudio Palomba, en rueda de prensa.
Sin embargo, hubo un cruce interno en el gobierno por la cifra exacta de los fallecidos. Matteo Salvini, ministro de Infraestructuras y Transporte, había confirmado la muerte de, al menos, ocho personas, pero desde el gobierno desmintieron la cifra.
«Actualmente hay una muerte confirmada, una mujer. Han sido halladas ocho personas desaparecidas, incluido un niño, y todavía tenemos una docena sin encontrar”, declaró Palomba en rueda de prensa. El fallecimiento también ha sido confirmado por el alcalde de Nápoles, Gaetano Manfredi.
Las autoridades instaron a los habitantes de Isquia, ubicada frente a las costas de Nápoles, a permanecer en sus casas para no entorpecer las labores de rescate.
Estiman que la feroz avalancha de barro dejó al menos 30 familias atrapadas dentro de sus viviendas, sin agua ni electricidad en la zona de Via Celario, en Casamicciola, en Ischia.