Madrid-Chamartín-Clara Campoamor es una de las principales estaciones de medios de transporte de la ciudad de Madrid. Hace unos cuantos meses se llevó a cabo un concurso organizado por Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) para elegir un diseño ganador de cara a una próxima renovación de dicha infraestructura y su respectivo mobiliario. La propuesta preseleccionada ha sido «Ecosistema abierto«, una iniciativa que busca transformar Chamartín en un hub referente de la movilidad sostenible, integrada y multimodal.
Chamartín ecosistema abierto, la propuesta presentada por Esteyco, UNStudio y b720 Arquitectura para la remodelación integral de Madrid-Chamartín Clara Campoamor y su integración urbana, ha resultado preseleccionada tras la apertura de plicas del concurso internacional lanzado por Adif Alta Velocidad (AV) para transformar este nodo ferroviario en una referencia internacional de la movilidad sostenible, multimodal, conectada e integrada.
La propuesta ha obtenido por unanimidad la puntuación más alta de los nueve diseños finalistas -presentados de forma anónima, bajo un lema-, por las principales firmas de ingeniería y arquitectura del mundo, y valorados por un jurado integrado por 16 miembros, que ha considerado aspectos como la funcionalidad -ferroviaria, comercial y terciaria-, la viabilidad constructiva, la accesibilidad e integración en la ciudad, la sostenibilidad ambiental, social y arquitectura de género y la imagen, con el fin de convertir al complejo ferroviario en un referente urbanístico y arquitectónico de Madrid.
¿En qué consistirá la renovación total de la estación?
Chamartín ecosistema abierto es un proyecto definido por tres elementos: las bóvedas, las terrazas y las torres. Con su elección, se apuesta por una estación abierta que promueve el diálogo entre la ciudad y el ferrocarril.
La propuesta respeta la memoria histórica de Chamartín y las inversiones que Adif AV aborda en la estación, recuperando las bóvedas como elemento singular e identificador de la estación. Los balcones urbanos (terrazas escalonadas), por su parte, generan permeabilidad con la ciudad, abren ventanas al ciudadano sobre la estación y se integran en el entorno, como prolongación de los parques situados a ambos lados del complejo.
Según han indicado a través de un comunicado de prensa, la solución arquitectónica mantiene la tipología de marquesinas individuales en los andenes y da prioridad a la visión directa entre los andenes y la ciudad. De esta forma, en parte, se traslada la representatividad de la estación a los edificios no ferroviarios, las torres, que serán percibidos por el viajero como la primera o última imagen de Madrid en su viaje. Desde los edificios -a modo de vigilantes atalayas del ferrocarril- se podrá disfrutar del tren, mientras que los viajeros sentirán que han llegado al corazón de una ciudad próspera, moderna y acogedora.
Sobre la estación de tren Madrid-Chamarín-Clara Campoamor
Madrid cuenta con una amplia estructura ferroviaria que permite el acceso a la capital desde todos los puntos de España y ofrece la posibilidad de moverse cómodamente por su interior. Las dos principales estaciones son Atocha y Chamartín, que acogen trenes de Media Distancia, Larga Distancia, Alta Velocidad y Cercanías.
La estación de Chamartín es un gran intercambiador, pues en ella no sólo se prestan servicios ferroviarios, sino también de metro y autobús. Desde el 23 de diciembre de 2020, la estación pasó a llamarse Madrid-Chamartín-Clara Campoamor, en recuerdo a Clara Campoamor, política, abogada y escritora madrileña, defensora de los derechos de la mujer española e impulsora del voto femenino en España en el siglo XX.
La estación cuenta con una gran oferta comercial y de restauración, además de disponer de una bolera, Bowling Chamartin, y de un gran centro de ocio en su planta superior, MEEU, en el que se engloban varios espacios dedicados al ocio y la gastronomía, incluyendo una pista de patinaje sobre ruedas.
Entre los servicios que se ofrecen a los visitantes se encuentran también unos aseos premium inaugurados en enero de 2022, en los que, por un euro (que se recupera a modo de descuento en las tiendas de la estación), se puede acceder a baños (con tecnología contactless); duchas; puestos de chequeo de salud (para tomar la tensión, medir la frecuencia cardíaca y la saturación de oxígeno en sangre, pesarse, calcular el índice de masa corporal (IMC) y medirse); una sala de lactancia con cambiador, microondas y una butaca para la mamá y el bebé; una sala para familia con inodoro para adulto, para niño y cambiador.