Los hipopótamos son uno de los animales más emblemáticos de África y, a menudo, se encuentran en sus ríos y lagos. Aunque estos mamíferos son conocidos principalmente por su tamaño y fuerza, muchas personas no se dan cuenta de que los hipopótamos pueden nadar sorprendentemente rápido, como lo demuestra este video viral de TikTok. Pero, ¿cómo pueden moverse tan rápido en el agua?
Los hipopótamos pueden ser animales enormes (algunos adultos pueden pesar hasta cuatro toneladas), pero aun así pueden moverse con una velocidad sorprendente cuando entran al agua. Los hipopótamos jóvenes son especialmente rápidos; según algunos estudios, pueden nadar a una velocidad de hasta 13 km por hora. Eso es aproximadamente la misma velocidad que un humano corriendo a toda velocidad.
Los hipopótamos adultos no son tan rápidos. Por lo general, solo alcanzan velocidades de alrededor de 4 a 8 km por hora. Sin embargo, incluso esta velocidad reducida sigue siendo increíblemente impresionante para un animal tan grande. Y significa que si alguna vez te encuentras en una situación en la que un hipopótamo te persigue por tierra o por agua, tendrás que correr lo más rápido que puedas.
Entonces, ¿por qué exactamente los hipopótamos se mueven tan rápido cuando entran al agua? La respuesta está en su fisiología.
Para empezar, sus cuerpos están adaptados para nadar; tienen pies palmeados y poderosos músculos que les permiten impulsarse a sí mismos a través del agua con facilidad. Pero quizás lo más importante de todo es que los hipopótamos tienen un órgano llamado «almohadilla de arrastre» ubicado cerca de la mandíbula inferior que ayuda a reducir la resistencia cuando se mueven por el agua. Esta plataforma de arrastre funciona como una especie de timón o volante; ayuda a mantenerlos rectos al mismo tiempo que reduce la fricción entre su cuerpo y el agua circundante. Esto les facilita moverse rápidamente sin gastar demasiada energía.
Los hipopótamos también se sumergirán bajo el agua durante períodos de tiempo como parte de sus mecanismos de defensa naturales. Son capaces de contener la respiración hasta cinco minutos a la vez e incluso pueden dormir bajo el agua tomando siestas cortas mientras aún están sumergidos debajo de la superficie. Esta habilidad les permite escapar de posibles depredadores que pueden estar en tierra o en el agua.