“¡Vaya, vaya! ¡Aquí no hay playa!”, dice la famosa canción española de los 80 de The Refrescos, burlándose de que Madrid es una de las regiones españolas más alejadas de la costa.
Pero los madrileños pueden ser los últimos en reír al final, ya que hay planes en marcha para construir la playa artificial más grande de Europa.
Estará a solo media hora de la capital en el municipio de Alovera en la provincia de Guadalajara, que técnicamente se encuentra en la región de Castilla-La Mancha, pero Madrid ya ha reclamado como propia la playa de Alovera.
Está en marcha la construcción de un megaproyecto que requiere más de 15 km² de arena y 25 km² de agua.
Todo el complejo de playa tendrá una superficie de 105.000 m² y contará con una enorme laguna, así como con una zona de arena aledaña.
La zona de arena contará con varios chiringuitos, hamacas para relajarse, canchas de voley playa y gimnasio al aire libre, mientras que la zona de la laguna contará con deportes náuticos, escuela de vela, toboganes, tirolinas y más piscinas para niños.
Pero no todo ha sido viento en popa. El proyecto, creado en conjunto con la empresa estadounidense Crystal Lagoons, se ha detenido en varias ocasiones, en parte debido a su enorme tamaño, los debates políticos y el enorme costo de la obra, que se estima en 15,6 millones de euros.
Según se informa, el objetivo es generar alrededor de 350 puestos de trabajo directos e indirectos y dar la bienvenida a entre 250.000 y 400.000 visitantes al año.
Mientras que algunos de los partidos políticos españoles (PP, Ciudadanos y Vox) están a favor de la playa, otros, incluidos PSOE y Unidas Podemos, están en contra, alegando que el área de la laguna se va a llenar con el agua potable extraída de la red local.
En su defensa, los constructores de Alovera Beach han aclarado que el volumen de agua es similar al consumo anual de una urbanización de 80 viviendas, pero con la diferencia de que la laguna solo se llenará una vez.
También han dicho que consumirá la mitad de agua que el riego convencional de un parque y 40 o 50 veces menos que el mantenimiento de un campo de golf, además de utilizar 100 veces menos productos químicos que las piscinas normales.
Para sumar a su compromiso de sostenibilidad, Crystal Lagoons y Alovera Beach también crearán un gran parque natural alrededor del complejo, con el fin de fomentar la biodiversidad en la zona.