El sábado por la noche, tres jóvenes neerlandeses resultaron heridos tras caer desde el balcón de un apartamento en Lloret de Mar, en la comarca de la Selva. El incidente ocurrió cuando cinco amigos se tomaban una foto de grupo y la barandilla del balcón cedió, provocando que tres de ellos cayeran desde una altura de entre cuatro y cinco metros.
Los jóvenes, de entre 18 y 19 años, habían llegado ese mismo día a Lloret de Mar y se hospedaban en una casa alquilada en la urbanización de los Pinos. Durante la primera noche de su estancia, se encontraban en el balcón tomando fotos cuando ocurrió el accidente.
Tras la caída, los servicios de emergencias fueron alertados y el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) envió cuatro dotaciones terrestres al lugar del incidente. Los tres heridos fueron trasladados al hospital Trueta de Girona. Según fuentes del Departamento de Salud, dos de los jóvenes recibieron el alta pocas horas después de ser ingresados, mientras que el tercero fue dado de alta al día siguiente.
El Ayuntamiento de Lloret de Mar ha decidido precintar temporalmente la Vivienda de Uso Turístico (HUT) donde ocurrió el incidente. La casa, construida en los años 70, tenía la licencia de alquiler vigente. Técnicos municipales y la Policía Local están evaluando la seguridad de la estructura del edificio.
Mientras tanto, los Mossos d’Esquadra, en coordinación con la Policía Local, están investigando los hechos para determinar las causas del accidente. Según informes del medio neerlandés L1 Nieuws, los padres de los jóvenes heridos están considerando presentar una denuncia contra los propietarios del inmueble por negligencia.
Algunos miembros del grupo han decidido continuar con sus vacaciones en otra casa alquilada en Lloret de Mar, mientras que otros han optado por regresar a los Países Bajos. Este incidente pone de relieve la importancia de garantizar la seguridad en las viviendas turísticas para prevenir accidentes similares en el futuro.