Un insólito incidente ocurrió en un vuelo de la aerolínea portuguesa TAP, cuando 132 hámsters escaparon de sus jaulas en la bodega de carga y causaron un verdadero caos en el avión. El Airbus A321neo, que viajaba desde Lisboa hasta la isla de Ponta Delgada, quedó fuera de servicio tras su aterrizaje, iniciándose una búsqueda exhaustiva para localizar a los pequeños fugitivos.
Según el sitio Aviação TV, los problemas comenzaron al descubrirse las jaulas dañadas al final del vuelo. Los manipuladores de equipaje notaron a los hámsters corriendo por la bodega de carga, mientras que otros permanecían ocultos en el interior del avión.
Un vuelo detenido y una cacería de días
El incidente no solo retrasó el regreso del avión a Lisboa, sino que obligó a dejarlo fuera de servicio durante cuatro días, tiempo en el que la tripulación revisó a fondo cada rincón de la aeronave en busca de los roedores. Afortunadamente, otras especies transportadas en el mismo envío, como pájaros y hurones, permanecieron en sus jaulas.
Cinco días después, el avión finalmente realizó su vuelo de regreso sin pasajeros, trasladándose a Lisboa para una inspección completa y garantizar que no quedaran rastros de los inesperados polizones.
Vídeo del caos
El periódico portugués Correio da Manhã compartió un video grabado por uno de los manipuladores de equipaje, en el que se ve a los hámsters corriendo libremente por la bodega. Aunque el incidente se resolvió sin mayores problemas, generó una ola de comentarios en redes sociales, con usuarios bromeando sobre la «primera invasión roedora aérea».
Este peculiar caso puso de relieve los riesgos en el transporte de animales y la necesidad de extremar medidas de seguridad para evitar incidentes como este, que además de causar risas, paralizó temporalmente las operaciones de un avión comercial.
