La alpinista rusa Natalia Nagovitsyna, de 47 años, lleva ocho días atrapada a más de 7.000 metros de altura en el pico Pobeda, en Kirguistán, tras sufrir un accidente durante el descenso que le provocó una fractura en la pierna. La situación es crítica: las extremas condiciones climáticas han dificultado todos los intentos de rescate.
El accidente ocurrió el pasado 12 de agosto, cuando Nagovitsyna inició el regreso después de alcanzar la cima. Su compañero de expedición logró asistirla en un primer momento, pero luego descendió hasta el campamento base en busca de ayuda. Al día siguiente, un grupo de alpinistas extranjeros alcanzó el lugar donde permanece la montañera y le dejó un saco de dormir, una tienda, alimentos y un hornillo para resistir, pero el mal tiempo frustró cualquier evacuación inmediata.
El Ministerio de Defensa de Kirguistán confirmó que, al séptimo día del accidente, la rusa seguía con vida. Imágenes captadas por un dron mostraron a Nagovitsyna acostada dentro de su tienda, lo que renovó las esperanzas de un rescate. Sin embargo, las operaciones han sido extremadamente riesgosas: un intento de evacuación aérea el pasado 16 de agosto terminó en tragedia, cuando un helicóptero tuvo que realizar un aterrizaje forzoso que dejó heridos a rescatistas y tripulantes.
Este martes, el portal Mountain.Ru informó que un equipo de cuatro personas alcanzó el Campo 2, con el objetivo de descender hasta los 5.800 metros y acercarse a la montañera en las próximas horas.
Nagovitsyna no es ajena a la tragedia en la montaña. En 2021 perdió a su esposo, Mikhail Nagovitsyn, quien murió de un derrame cerebral en el Khan Tengri, otro de los picos más imponentes de la cordillera del Tian Shan. Ella estuvo presente en aquel momento y un año después regresó para colocar una placa en su memoria, un gesto retratado en el documental To stay with Khan Tengri, de Dmitry Sinitsyn.
El Pobeda, con más de 7.400 metros de altura, es considerado uno de los picos más desafiantes del mundo. Forma parte de las cinco cumbres soviéticas necesarias para obtener el prestigioso reconocimiento de “Leopardo de las Nieves”, un título reservado solo para los montañeros más experimentados.
Hoy, el mundo del alpinismo observa con tensión y esperanza el desenlace de esta lucha desesperada por sobrevivir en el corazón del Tian Shan.
