La provincia de Córdoba dio un paso histórico en materia de conservación al declarar a ocho especies animales como Monumentos Naturales Provinciales, la máxima categoría de protección prevista en la ley. La medida, publicada en el Boletín Oficial, busca garantizar la preservación de la biodiversidad local y reforzar la identidad cultural cordobesa.

Las especies reconocidas son: el Sapo de Achala (Rhinella achaleusis), la Tortuga Chaqueña o Terrestre (Chelonoidis chilensis), el Loro Hablador (Amazona aestiva), el Águila Coronada (Buteogallus coronatus), el Cóndor Andino (Vultur gryphus), el Aguará Guazú (Chrysocyon brachyurus), el Guanaco (Lama guanicoe) y el Pecarí Chaqueño o Quimilero (Parachoerus wagneri).
La ministra de Ambiente y Economía Circular, Victoria Flores, explicó que este reconocimiento implica la puesta en marcha de Planes de Conservación específicos, con acciones centradas en la protección de hábitats, el impulso a la investigación científica y la promoción de la educación ambiental.
La designación se apoya en estudios y propuestas realizadas por distintos grupos de investigación, que fundamentaron la importancia ecológica, cultural y simbólica de cada especie. Además, apunta a consolidar un marco legal y técnico que fortalezca las políticas públicas provinciales y promueva una mayor conciencia social en torno a la defensa del patrimonio natural.
La figura de Monumento Natural Provincial fue incorporada en 2024, tras una modificación de la Ley 6.964 de Áreas Naturales Protegidas. Esta categoría permite declarar como tales a especies o sitios con un valor sobresaliente en términos ecológicos, científicos, históricos o culturales.
“Con esta decisión, Córdoba fortalece su identidad ambiental y asegura la continuidad de su riqueza biológica y cultural”, señalaron desde el Gobierno provincial, destacando que el reconocimiento no solo protege a estas especies, sino que también las convierte en símbolos vivos de la relación entre la naturaleza y la sociedad cordobesa.

