La historia de James Bowen y su gato Bob recorrió el mundo y demostró cómo una mascota puede cambiar la vida de una persona cuando menos lo espera.
James, un músico y escritor callejero que vivía en las calles de Londres debido a su adicción a las drogas, encontró en 2007 a un gato abandonado y herido. Al ver que nadie lo ayudaba, lo llevó a una veterinaria y, aunque intentó separarse de él, terminó adoptándolo y lo llamó Bob. Lo que nunca imaginó es que ese felino se convertiría en su compañero inseparable y la razón para darle un giro radical a su vida.
Una amistad que cambió destinos
Bowen nació en 1979 en Surrey, Inglaterra. Tras el divorcio de sus padres se mudó a Australia, donde sufrió bullying y abandonó la escuela. A finales de los 90 regresó a Londres, pero la situación lo llevó a vivir en la calle, atrapado por la heroína y con diagnósticos de TDAH, esquizofrenia y depresión.
Con la llegada de Bob todo cambió. El gato lo acompañaba a tocar música en Piccadilly Circus y a vender la revista The Big Issue, que apoya a personas sin hogar. Su presencia comenzó a llamar la atención: las fotos del felino sobre sus hombros se volvieron virales y llegaron hasta los medios de comunicación.
En 2012, James consiguió publicar el libro “A Street Cat Named Bob” (Un gato callejero llamado Bob), que fue traducido a más de 30 idiomas y se convirtió en un éxito internacional, llegando incluso al cine. Gracias a las ventas, Bowen pasó de dormir en las calles a tener su propia casa y una vida estable.

El legado de Bob
Lamentablemente, en 2020 Bob murió tras ser atropellado por un auto. James confirmó la noticia con un mensaje conmovedor: “Bob salvó mi vida. Es tan simple como eso. Me dio mucho más que compañía, me dio un propósito. Nunca hubo un gato como él y nunca lo habrá”.
Hoy, Bowen sigue recordando a su mejor amigo. Cada año le rinde homenaje en la estatua que se encuentra en Islington Green, donde fanáticos de todo el mundo también dejan flores y mensajes.
El vínculo entre James y Bob es considerado una de las historias más inspiradoras sobre la fuerza de la amistad entre humanos y animales: un gato callejero que no solo cambió una vida, sino que la llevó a lo más alto.
