En una playa en el área residencial de Roquetas de Mar, en el sureste de la provincia española de Almería, fue encontrado un delfín muerto con el nombre «Juan» tallado en uno de sus costados. El cadaver además tenía otros cortes profundos a lo largo de su cuerpo.
Los miembros de Equinac, una organización que rescata y recupera la fauna marina, trabajaron junto a los oficiales de policía para retirar el cadáver.
«Las lesiones y los cortes no se realizaron en la playa. Debe haber ocurrido en el mar y la tormenta la ha sacado del agua», dijo la coordinadora de Equinac, Eva Maria Moron.
El animal es un delfín hembra de aproximadamente 1.65 m de largo.
Cuando la organización publicó fotos de los delfines esculpidos en Facebook, la gente expresó su sorpresa ante la «barbaridad» del ataque.
La hipótesis principal de Equinac es que no estaba vivo cuando se cortó, pero aún no está claro cómo murió el animal, si fue debido a la actividad humana o algo más.
Según la ley española, si alguien encuentra un delfín muerto, debe notificarlo a las autoridades. De hecho, si los pescadores que capturan delfines por accidente en redes o con anzuelos también deben notificar a los funcionarios.
La policía está investigando el hecho y no se han reportado arrestos.