La magia de la Navidad realmente tuvo efecto en Sarah y Paul, dos viajeros británicos que se conocieron en el aeropuerto, justo antes de viajar a Las Vegas.
Sarah Elliot, de 34 años, y Paul Edwards, de 36 años, se conocieron el 22 de diciembre en el aeropuerto de Gatwick y el 23 se comprometieron y reservaron un lugar para celebrar bodas: el Bellagio Hotel and Casino.
Los dos dicen que tuvieron una conexión inmediata, que no supieron explicar. Dicen que desde el primer momento se sintieron como si fueran mejores amigos, aunque admiten que saben que no todo será color de rosa y su nuevo matrimonio será todo un desafío.
Antes de su matrimonio, los dos tuvieron varias parejas, con las que hicieron las cosas de manera tradicional, y no les funcionó. Por eso creen que esto es una buena señal.
«Nos llevamos muy bien, tal vez deberíamos casarnos»
El lunes por la mañana, tres días después de que empezaron a hablar, acordaron casarnos. Casi ninguno de sus amigos los apoyó y de hecho no le han dicho nada a su familia, dicen que esperarán volver a su país para anunciarles la noticia.
Perdió su anillo de bodas mientras buceaba en la Gran Barrera de Coral, dos semanas después un buzo lo encontró y se lo devolvió
Stuart Brown y su esposa Amie, una pareja de recién casados, viajaron a Australia en su luna de miel. Entre una de las actividades que tenían planeadas era hacer snorkel en el arrecife Agincourt en Port Douglas, Queensland. Hasta ahí todo parecía perfecto…
Lo que Stuart no se imaginó es que mientras buceaba en la Gran Barrera de Coral, se le saldría su alianza de oro de 900 dólares. Tan solo unos minutos después de haberse sumergido en el agua.
Obviamente en el momento intentaron encontrarla, pero era una tarea prácticamente imposible. Él se encontraba devastado, porque sabía que no lo podría reemplazar, debido a su valor emocional. Ya, un poco resignado, decidió de igualmente reportarlo y rellenó un papel de propiedad perdida. Continuar leyendo…