En diciembre de 2018, en Polonia, tuvo lugar la 24ª Conferencia de las partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático. El tema principal de la reunión fue frenar el calentamiento global y la adaptación al cambio climático.
Impulsado por este evento, decenas de miles de belgas realizaron una manifestación en Bruselas para pedir al gobierno que tomara medidas más decisivas para proteger el clima. Y funcionó.
Las autoridades belgas planean plantar alrededor de dos mil árboles al año.
Las autoridades de Bruselas se han comprometido a plantar un árbol por cada niño nacido en la ciudad, al rededor de unos 2.000 al año.
Este compromiso de la ciudad de Bruselas contribuirá a reducir sus emisiones de Co2 en un 30% para el 2025.
La campaña Baby boom informará a los padres de los niños recién nacidos de esta acción a través de una pequeña tarjeta una vez que se registra el nacimiento.