Los residentes de una de las calles más fotografiadas de París están hartos de tener todos los días personas merodeando en sus puertas, para lograr conseguir fotos increíbles.
La calle Rue Crémieux es famosa por sus coloridas fachadas: rosas, púrpuras, azules, naranjas y verdes. Es verdaderamente hermosa, y vale la pena visitarla.
Pero las personas que viven en esa calle no están felices con la fama del lugar, por lo que le pidieron a las autoridades de la ciudad que cerrara la calle a los no residentes en las noches y los fines de semana.
Los residentes dicen que han estado luchando contra los visitantes en sus calles durante los últimos cuatro años. Las publicaciones de Instagram etiquetadas con «Rue Crémieux» superan los 30.000.
El vicepresidente de la asociación de la calle dijo en un comunicado que los residentes tienen que lidiar con la música alta fuera de sus ventanas mientras la gente filma videos.
Los residentes esperan que la ciudad de París acepte instalar las puertas en cada extremo de su pequeña calle para mantener a la gente fuera.
