Tres jóvenes ecologistas arrojaron pintura roja y negra en las paredes del patio de una mansión que la estrella del Inter Miami posee en una isla del Mediterráneo.
Un grupo de activistas ambientales de la organización «Futuro Vegetal» vandalizó con pintura la residencia del campeón mundial de fútbol, Lionel Messi, en la isla de Ibiza, España. Según informaron en sus redes sociales, el objetivo del ataque fue resaltar la responsabilidad de los ricos en la crisis climática.
Los miembros de la agrupación juvenil se adjudicaron las manchas de pintura roja y negra que cubren la vivienda de descanso del futbolista rosarino. En un video difundido en Internet, se observa a tres jóvenes lanzando la pintura sobre las paredes de la casa y luego posando frente a la cámara con un cartel que dice en inglés: «Ayuda al planeta, cómete un rico. Abolición de la policía».
En un comunicado, el grupo ecologista explicó que con esta acción de “desobediencia civil no violenta” buscan denunciar las políticas gubernamentales que agravan la crisis climática, “así como la desigual responsabilidad en la misma”.
«Nos enseñan que los poderosos son intocables. Es cierto que las políticas se redactan e interpretan al servicio de quienes más tienen, atentando directamente contra los derechos del resto de la población. Pero solo son el 1%. Hoy tres activistas han decorado la mansión ilegal de Messi», señalaron en la descripción del video.
De acuerdo con un informe de 2023 de la ONG Oxfam, el 1% más rico de la población mundial generó en 2019 la misma cantidad de emisiones de carbono que los dos tercios más pobres de la humanidad, aunque las comunidades más vulnerables son las que sufren las “peores consecuencias” de esta crisis.
Según «Futuro Vegetal», la mansión de Messi en la isla del Mediterráneo es una construcción «ilegal» que el futbolista adquirió en 2022 de un empresario por la “exorbitante” cifra de 11 millones de euros. Supuestamente, la casa incluye un spa, un sauna y una sala de cine.
«Mientras esto sucede, solo en Baleares han muerto entre dos y cuatro personas como consecuencia directa de la ola de calor», afirmaron. Además, subrayaron que la contaminación causada por una pequeña parte de la población es posible «por el apoyo de los poderes públicos a un sistema económico-social que atenta contra la vida».
El portavoz de Futuro Vegetal, Bilbo Bassaterra, aseguró que «la ley no es igual para todos», ya que esta misma semana se desalojaron a casi 200 trabajadores en Ibiza, mientras que el Partido Popular (PP), «de la mano de Vox, planea la legalización de edificaciones ilegales a cambio de un pago».
«Futuro Vegetal», grupo de activismo ecologista vinculado con movimientos internacionales similares, ha realizado decenas de protestas similares. En 2022, pegaron sus manos con goma a los marcos de pinturas del maestro español Francisco de Goya en el Museo del Prado, en Madrid. En 2023, activistas del grupo lanzaron pintura a un superyate en Ibiza que supuestamente pertenecía a Nancy Walton Laurie, la multimillonaria heredera del gigante comercial estadounidense Walmart.
La policía española informó en enero que había detenido a 22 miembros de «Futuro Vegetal», incluyendo a los dos que participaron en la protesta del Prado y a los tres principales dirigentes del grupo.
