Sucedió en un museo de Oslo, Noruega cuando dos activistas por el medioambiente intentaron pegarse a la obra de Edvard Munch (1983), El Grito.
La policía informó que fue alertada por el Museo Nacional de Noruega y que tenía a tres personas bajo su “control”. Una tercera persona filmó a la pareja que trató de adherirse al cuadro, informó la agencia de noticias noruega NTB. Según trascendió, quedaron restos de pegamento en la vitrina que cubre el cuadropero la obra no sufrió daño alguno.
Dos de las activistas habían tratado de adherirse al cuadro mientras otra filmaba la escena, gritando «no habrá ningún grito cuando la gente muera». Las activistas, todas mujeres, pertenecen al grupo ecologista Stopp Oljetinga (Detengan la actividad petrolera), que en un comunicado dicen que la acción pretende alertar a la gente y presionar al Gobierno noruego para que cambie la política del principal exportador de gas y petróleo de Europa occidental.
“Hacemos una campaña contra El grito porque es quizás el cuadro más famoso de Noruega”, dijo la portavoz de los activistas, Astrid Rem, a The Associated Press. “Ha habido muchas acciones similares en toda Europa, han conseguido algo que ninguna otra acción ha logrado: conseguir una gran cobertura y prensa”.
«La policía ha arrestado a 3 mujeres, ciudadanas de Finlandia, Dinamarca y Alemania. Estamos trabajando para aclarar su conexión con Noruega. También estamos en contacto con otra mujer con estatus de testigo. La policía investigará el asunto», escribió el cuerpo policial en Twitter.
