Activistas comprometidos con el medio ambiente, miembros del grupo Última Generación, llevaron a cabo una protesta audaz en la ciudad de Berlín al colorear con tonos vibrantes, como amarillo y naranja, las imponentes columnas de la Puerta de Brandeburgo. En un comunicado, el grupo expresó con determinación su intención de persistir en sus acciones de protesta hasta que se implementen medidas suficientes para abordar la crisis climática.
Según un portavoz policial, las seis columnas emblemáticas se vieron afectadas por la acción, y varias personas fueron detenidas en relación con el incidente. Además, los activistas esparcieron pintura en el suelo de la Pariser Platz, ubicada junto a la Puerta de Brandeburgo.
Última Generación, conocido por sus métodos de protesta extremos, que incluyen bloqueos de tráfico, ha logrado desplazar la atención pública de las manifestaciones de Fridays for Future. Marion Fabian, portavoz del grupo, afirmó: «Seguiremos con nuestras protestas hasta que haya un cambio significativo en la política para abordar la crisis climática. A más tardar en 2030, debemos renunciar al carbón, el petróleo y el gas».
Además, el grupo advirtió que la próxima semana llevarán a cabo nuevos bloqueos en las calles de Berlín. Para respaldar sus acciones de protesta, los activistas afirmaron haber recaudado donativos por un valor de 600,000 euros. La situación sigue tensa en la capital alemana, ya que los responsables del ataque mantienen la amenaza de realizar más acciones en un esfuerzo por impulsar un cambio urgente en la lucha contra el cambio climático.
