Aomori: la ciudad donde la nieve es parte del día a día

e3582c5c-e348-45c1-b6e9-cc284107279a_woman-libre-1200_default_0
Redactora
¡Valora esto!

En la ciudad japonesa de Aomori, situada en el norte del país, los inviernos son algo completamente distinto a lo que la mayoría de las personas podría imaginar. Con un promedio anual de ocho metros de nieve, es considerada la ciudad más nevada del mundo, según datos de AccuWeather. Para poner esto en perspectiva, mientras en ciudades como Madrid medio metro de nieve paraliza todo, en Aomori esto sería solo el comienzo de un invierno normal.

Aomori, con una población de aproximadamente 280,000 habitantes, está rodeada por las montañas Hakkōda y la bahía de Mutsu, lo que genera intensas borrascas invernales. Estas condiciones hacen que los inviernos en la ciudad sean verdaderamente extremos, pero sus habitantes han aprendido a adaptarse y, lo que es más sorprendente, a disfrutar de ello.

Festivales en medio del hielo y nieve

Lejos de dejarse intimidar, los habitantes de Aomori celebran el invierno con festivales de nieve, donde crean castillos y figuras enormes de hielo, además de organizar desfiles a lo largo de la ciudad. Las carreteras, aunque a menudo están rodeadas por muros de nieve de varios metros de altura, se convierten en parte del paisaje habitual, y muchas de ellas se cierran durante el invierno para ser despejadas por equipos de excavadoras. Este proceso crea impresionantes corredores de nieve que atraen a turistas cada año.

image image 55

Adaptarse a la nieve es un estilo de vida

En Aomori, la vida no se detiene a pesar de las condiciones extremas. Los habitantes pasan buena parte del día con una pala en mano, excavando la nieve para poder salir de sus hogares. Para ellos, más que una molestia, esta actividad se ha convertido en un ejercicio diario, con organizaciones locales que incluso proponen rutinas de calentamiento y ejercicios específicos para optimizar la tarea de excavar.

Además, algunas aceras en la ciudad cuentan con calefacción eléctrica, lo que evita que se acumulen grandes cantidades de nieve. Sin embargo, en muchas zonas de la ciudad, los habitantes se ven obligados a usar crampones o incluso raquetas de nieve para poder caminar sin resbalarse en las superficies heladas.

image image 56

Tecnología contra la nieve

Aomori no se queda completamente aislada en invierno. La línea ferroviaria de alta velocidad que conecta la ciudad con Tokio cuenta con un sistema que rocía agua tibia sobre las vías para evitar el bloqueo por nieve. Además, los trenes locales incluyen estufas para mantener a los pasajeros cómodos durante sus viajes. En cuanto al aeropuerto de la ciudad, un equipo de 38 vehículos quitanieves trabaja de forma constante para despejar las pistas y asegurar que los aviones puedan aterrizar y despegar sin problemas.

image image 57

Aomori es el ejemplo perfecto de cómo una ciudad puede adaptarse a condiciones climáticas extremas y, en lugar de detenerse por la nieve, convertirla en una parte esencial y celebrada de su identidad.

¡Valora esto!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *