Coincidentemente con el día de su toma de posesión como el 46° presidente de los Estados Unidos, Joe Biden firmó el pasado 20 de enero una orden ejecutiva que ordena el uso obligatorio de máscaras en propiedad federal con el objetivo de prevenir el contagio de COVID-19. La iniciativa se extiende también a los parques nacionales.
Según ha trascendido, la orden ejecutiva requiere que los empleados federales y los visitantes usen máscaras y mantengan la distancia física mientras se encuentren en tierras federales, incluidos los parques nacionales y los monumentos federales.
La reglamentación recientemente promulgada por Joe Biden indica: “Es política de mi Administración detener la propagación de la enfermedad del coronavirus 2019 (COVID-19) confiando en los mejores datos disponibles y medidas de salud pública basadas en la ciencia. Tales medidas incluyen el uso de máscaras cuando se está cerca de otras personas, el distanciamiento físico y otras precauciones relacionadas recomendadas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). En pocas palabras, las máscaras y otras medidas de salud pública reducen la propagación de la enfermedad, particularmente cuando las comunidades hacen un uso generalizado de tales medidas y, por lo tanto, salvan vidas”.
Según Reuters, Biden también planea exigir que cualquier persona en los aeropuertos o en el transporte público, incluidos aviones, autobuses interurbanos y trenes, use máscaras. Muchas aerolíneas y compañías de trenes (incluida Amtrak) ya han exigido el uso de máscaras, aunque la ley federal no lo exige.
El mandato de la máscara ha sido durante mucho tiempo un principio de la campaña de Biden, quien en ese sentido ha sabido diferenciarse de Donald Trump y su «negacionismo» hacia el verdadero impacto de la pandemia de coronavirus. En octubre del 2020, Biden dijo: “Como presidente, ordenaré el uso de máscaras en todos los edificios federales y en todo el transporte interestatal porque las máscaras salvan vidas, punto. Usar máscaras no es una declaración política; es un imperativo científico«.