Las personas que viajen desde el exterior hacia Brasil y no se encuentren vacunadas contra el COVID-19 tendrán que cumplir con un período de aislamiento de cinco días que se tendrá que realizar en la ciudad a la que llegan.
Las nuevas medidas implementadas por las autoridades de Brasil fueron publicadas el pasado jueves, 9 de Diciembre. Además de los requerimientos actuales con los que tienen que cumplir quienes llegan a Brasil, que consisten en presentar un certificado de COVID-19 con resultado negativo antes de partir, desde el próximo sábado, 11 de Diciembre, quienes no se encuentren vacunados contra el COVID-19 tendrán que cumplir con una cuarentena de cinco días en la dirección que dieron en su declaración de viaje, según anunció el gobierno.
Una vez que las personas cumplan con los cinco días de aislamiento, tendrán que realizase una nueva prueba de COVID-19 y, si arroja un resultado negativo, podrán consultar con las autoridades locales de salud para confirmar si tienen permitido abandonar el aislamiento o no.
Antonio Barra Torres, quien se encuentra a cargo del sector de salud de Brasil, explicó a la agencia de noticias Associated Press que esta nueva medida de cuarentena tiene la intención de desalentar el turismo «anti-vacunas» en Brasil. Esta decisión de implementar el aislamiento «es una medida disuasiva y educativa», dijo Torres al mismo medio.
Esta nueva medida de las autoridades de Brasil se da en el marco de la preocupación que se existe a nivel global por la nueva variante de COVID-19, Omicron. De acuerdo a la información conocida, se trata de una variante que se contagia mucho más rápido, aunque hasta el momento se desconoce si es más peligrosa que las que se han conocido hasta ahora.
Dentro del país también se han tomado otras medidas para frenar la circulación del virus. Recientemente fue anunciado que Río de Janeiro ha decidido cancelar las celebraciones de fin de año para evitar una mayor cantidad de contagios.