Según datos relevados por el Ministerio de Salud, en el estado brasileño más poblado, Sao Paulo, se han registrado hasta el momento 304 muertes por Covid-19.
Si bien no resulta una cifra significativa considerando el impacto del Covid-19 en otros países, se trata de un número que impacta debido a que, sobre el total de casos de fallecidos a nivel nacional en Brasil, San Pablo registra un 54,9%.
En cuanto a casos positivos de contagiados por coronavirus, se han identificado al menos 4.861 casos en San Pablo, de un total de 12.056 en todo el territorio nacional de Brasil.
En efecto, anticipando a que podría ser el estado más afectado por la propagación de este virus, en San Pablo se ha prorrogado por dos semanas más las medidas de cuarentena. Así, el confinamiento que rige en San Pablo desde el 24 de marzo se extiende hasta el próximo 22 de abril. Con esta medida, continuarán funcionando solamente los comercios considerados esenciales, como supermercados y farmacias.
Aún así, según los hipotéticos escenarios que se estiman para la ciudad, debido a esta pandemia, al menos 110.000 personas podrían morir en los próximos seis meses.
El escenario estimado aún con las restricciones de circulación impuestas estima el fallecimiento de al menos 1.300 personas hasta el 13 de abril, en tanto que de no aplicarse ninguna medida ese número se elevaría a casi 5.000, y el semestral, a 277.000.
“Sin ningún tipo de medida, tendríamos 277.000 muertes en el estado de Sao Paulo, pero con las medidas, vamos a evitar 166.000 muertes”
Joao Doria, gobernador del estado de San Pablo.
Alerta por el futuro de Brasil: víctima del coronavirus y de las polémicas declaraciones de Jair Bolsonaro
Mucho hemos escuchado acerca de esa consideración de que el enemigo siempre se encuentra fuera. Aquel a quien hay que temer se encuentra al acecho de nosotros pero desde fuera.
Contradictoriamente, con el tiempo fuimos asumiendo que el mayor enemigo puede estar dentro, incluso hasta ser uno mismo, a través del miedo o la negación.
Hoy hay quienes no dudan en calificar a Brasil como el actual ‘foco rojo’ del coronavirus en Sudamérica. Y, justamente, más allá de la rápida propagación de esta pandemia, el mayor enemigo no resulta un virus que viene de afuera, sino que el gran temor hoy es no saber/poder actuar en consecuencia. Y en eso, mucho tendrán que ver las autoridades a cargo de gobernar.
Y es que no se trata sólo de vaticinar una desfavorable evolución de acuerdo a la cantidad de casos con coronavirus.
Como si fuera poco, aunque es lógico que ocurra, esta situación tan insólita ha despertado tensión y conflictividad entre autoridades, partidos políticos y diferentes ciudades del territorio brasileño.
Así mismo, personas como Joao Doria, el mismísimo gobernador de San Pablo, han hecho público su disconformidad y descontento para con el mandatario de Brasil. Doria ha indicado explícitamente que Bolsonaro “no está en plenas facultades mentales” para hacer frente a la crisis sanitaria por coronavirus. Además, afirma que el presidente pareciera estar “desconectado de la realidad“, con lo cual no sumaría en condiciones para gobernar el país. Continuar leyendo…