Jacob, en el 2016, estaba disfrutando de sus vacaciones en Tailandia, cuando de repente fue embestido por un conductor borracho. Eso lo llevó de urgencia al hospital, donde le realizaron una cirugía plástica de 4 horas, ¡si, 4 horas!
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Mountains give me an overwhelming sense of freedom and happiness. Every. Single. Time.
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Cuando salió de la intervención y ya estaba recuperándose en su habitación del hospital, se dio cuenta que lo que le había pasado era una advertencia para darse cuenta que la vida es corta y maravillosa. Pero es solo UNA, así que hay que disfrutarla al máximo.
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En ese momento decidió, que cuando abandonara el hospital, cada día lo viviría al máximo. Hoy cuenta que tuvo un 2017 increíble: cumplió el sueño de su infancia y fue de excursión al campamento base del monte Everest, paso tiempo relajándome en los magníficos desiertos de Irán, se tiró en paracaídas en Nueva Zelanda, hizo motorbiking en la India, manejó más de 3.000 kilómetros por todo Omán, subió a docenas de montañas y volcanes, pasó 3 días acampando en el llamado «Marte en la Tierra», tomó algunas fotos en Hobbiton, vivió 5 días en los barrios marginales de Mumbai y probó algunas bebidas de maíz en Corea del Sur.
Vivió cada día como si fuera el último y planea seguir haciéndolo.