Todo indicaría que los científicos están un paso más cerca de poder controlar el clima, teniendo en cuenta que una nueva investigación reveló qué podría hacerse para que las nubes generen lluvia.
Parece ser que los lugares a los que pude llegar la ciencia son ilimitados, traspasando los límites de cosas que antes solo veíamos en películas de ciencia ficción. ¿Quién hubiese imaginado que sería posible controlar el clima o, por lo menos, poder a ser que llueva cuando así lo deseemos? Bueno, quizás no todos, pero sí un grupo de personas en particular.
¿De qué estamos hablando? El meteorólogo de la Universidad de Reading, Giles Harrison, junto a algunos de sus colegas desarrolló una investigación para ver conocer las cargas eléctricas de lluvia en nubes que no son de tormentas. Esta investigación se enfocó en la carga eléctrica que existe en el aire y los relámpagos en las nubes de tormenta, mostrando que cuanto más grandes eran las variaciones en las cargas, más fuerte era la atracción entre las gotas.
Harrison explicó que esta conexión, representada en los cálculos desarrollados por Maarten Ambaum y publicados en la revista de investigación Proceedings of the Royal Society, les permite conocer mejor sobre la pregunta de «¿cómo llueve?». El equipo de investigación, por su parte, descubrió que que las cargas entre las gotitas «migrarán» de unas a otras, lo cual «lleva a una fuerza de atracción que puede dominar si las gotas están cerca unas de otras».
Según investigaron, sería posible incentivar la formación de gotas de lluvia sobrecargando las nubes con electricidad, y también notaron que al aplicar campos eléctricos a las nubes solo aumentaría las probabilidades en un 5% de que las gotitas permanezcan juntas, pero el efecto sería suficiente para estimular o suprimir la lluvia, según reportó Futurism.
La financiación par esta investigación proviene de Emiratos Árabes Unidos, con la finalidad de buscar cómo aumentar las lluvias teniendo en cuenta las extremas sequías que tienen lugar en el país. El proyecto está en marcha desde 2017, como mínimo.