Si te apetece alojarte en un lugar que parezca una nave espacial, sin las molestias de viajar por el espacio, este peculiar hotel es para ti.
En CityHub en Copenhague, una mezcla entre un albergue y un hotel, los huéspedes duermen en cápsulas en forma de L estilo Tetris que cuestan 270 dólares por noche.
A primera vista parecen claustrofóbicos, pero en realidad son sorprendentemente espaciosos, con espacio suficiente en el interior para dos adultos y equipaje.
Es más, son cálidos y, a pesar de su tamaño compacto, casi inquietantemente silenciosos.
En el interior espera una cómoda cama tamaño king, dos estantes, puertos de carga, un altavoz Bluetooth, suficiente espacio para estar de pie y un espejo distorsionado.
A su llegada, los huéspedes utilizan un sistema de check-in de autoservicio y reciben una pulsera como llave.
Las luces LED danzantes te dan la bienvenida al interior, como si estuvieras entrando a una discoteca.
Los viajeros pueden servirse cerveza y vino en el bar de autoservicio y luego relajarse en una zona tranquila.
Pero los viajeros solitarios que deseen conocer personas con ideas afines deben saber que las actividades sociales son inexistentes y que otros se mantienen apartados en las zonas comunes.
Con más de 8.800 reseñas en Booking.com y una puntuación media de nueve sobre diez, es fácil ver por qué CityHub es una opción popular para los viajeros.
Pero, ¿vale la pena pagar casi 300 dólares por noche? ¿Hay suficiente espacio para que dos personas se relajen cómodamente?
Lo hay, pero la habitación puede parecer pequeña para dos personas altas.
Sin embargo, CityHub es una experiencia memorable y peculiar, con un servicio fantástico por parte de un personal amable y una ubicación conveniente a solo 1,3 km de los Jardines de Tivoli y a poca distancia de animados bares y restaurantes. Considerándolo todo, podemos decir que el precio representa una buena relación calidad-precio.
Para obtener más información, visita cityhub.com/copenhagen/hub.
Copenhague es la tercera ubicación en la que CityHub se lanza, después de Ámsterdam y Rotterdam.
