Atención viajeros que pronto estén recorriendo -o piensen recorrer- la Costa Brava y sus pueblos marineros: uno de los puntos turísticos más atractivos de la zona costera de España acogerá una experiencia inmersiva y multisensorial sobre la crisis climática y se presenta como una gran excusa para hacer una parada técnica en Lloret de Mar. En este post te contamos de qué se trata.
La propuesta estará ubicada en el Castillo d’en Plaja, un icono turístico de la villa situado en la playa de Lloret que, desde ahora, pasa a tener un nombre alusivo a su ubicación: rebautizado como «Castillo de Lloret«, esta construcción se inició en 1935 y se inauguró en 1940, siendo popularmente conocido como “El Castell d’en Plaja”.
Con el tiempo se ha convertido en un icono indiscutible del skyline de la ciudad y uno de los recursos arquitectónicos más fotografiados de Lloret: en un intento por abrirlo a la comunidad y potenciar su interés turístico, albergará una imponente exposición sobre crisis climática y sostenibilidad. El proyecto también incluye una terraza al aire libre con servicio de bar y espectaculares vistas a la Costa Brava. Según han indicado autoridades locales, con esta nueva iniciativa esperan recibir 100.000 visitantes al año.
“Con este proyecto desde el Grupo GBI hacemos valer nuestro compromiso con el entorno. Queremos que se convierta en un espacio pedagógico que proyecte la situación actual pero que también muestre al visitante las diferentes soluciones que tenemos a nuestro alcance y sobre todo, que los lloretenses por fin se hagan suyo un edificio histórico que siempre ha sido privado”, ha expresado el empresario lloretense y propietario del castillo, Gustavo Buesa.
Castillo de Lloret y una experiencia inmersiva sobre crisis climática: ¿de qué se trata?
De acuerdo a lo anunciado por el área de turismo del Ajuntament de Lloret de Mar, el Castillo de Lloret ofrecerá al visitante un viaje en 3 etapas para sentir y comprender el cambio climático en toda su dimensión:
- Sala Causas. Donde el visitante se adentrará a través del metaverso en un territorio totalmente inexplorado: las actividades humanas que han contaminado el planeta y han provocado el calentamiento global.
- Sala Consecuencias. El visitante vivirá los efectos de la emergencia climática en primera persona: los dramáticos efectos de la deforestación en la selva amazónica; el impacto de un incendio de sexta generación; la contaminación de los océanos o el naufragio en una tormenta de gran tamaño. Para ello contará con el soporte de la última tecnología existente: una pantalla LED de 12 metros de largo, una plataforma que se mueve y vibra al ritmo de las imágenes y todo tipo de efectos sensoriales: sonoros, lumínicos y térmicos.
- Sala Soluciones. Para conocer y experimentar con gran espectáculo multisensorial. El visitante explorará en este espacio todas las claves para detener la crisis climática, a través de un bonito espectáculo de imagen, luz y sonido y distintos juegos digitales interactivos.
En paralelo, durante los meses de temporada alta, sobre la fachada del castillo se proyectará cada noche un espectáculo de luces y colores, que podrá ser visto desde Sa Caleta y desde parte de la playa de Lloret. Ya durante el resto del año, el edificio lucirá una discreta y elegante iluminación perimetral, que seguirá cada una de las almenas del castillo, y que lo hará destacar desde la lejanía.
Importante: el espacio está preparado para acoger escuelas e institutos con un recorrido hecho a medida ya que el proyecto quiere convertirse también en una importante herramienta pedagógica.
Para dar vida a esta nueva era del Castillo de Lloret, se han llevado a cabo tareas de restauración, en especial atendiendo al deficiente estado de conservación del edificio. Durante el proceso de adecuación, la sostenibilidad ha sido también uno de los aspectos fundamentales a tener en cuenta en el proyecto constructivo: de hecho, gran parte de la electricidad de la que se abastece el castillo proviene de fuentes no contaminantes, instaladas en el propio recinto.
En el espacio exterior se instalarán unos elegantes árboles metálicos, dotados de placas fotovoltaicas, que protegerán del impacto del sol durante el día e iluminarán la terraza al anochecer. En paralelo, debido a la singular ubicación del castillo, que se encuentra justo en frente del poblado ibérico del Turó Rodó y al pie de Sa Caleta y del camino de ronda, los trabajos de rehabilitación han sido especialmente complejos, contemplando también una actualización de la accesibilidad, un refuerzo estructural y nuevas instalaciones y servicios.