Ellos son Camila y Arturo. Después de un proceso de 2 años en el que se despojaron de todas sus pertenencias, en abril de 2017 finalmente viajaron junto con sus 2 hijos a Bali, Indonesia. A través de un sistema de pasajes económicos, supieron sobre la hora que había espacio en el vuelo que los llevaría a su destino.
Una vez arriba del avión, reservaron habitaciones de hotel y se lanzaron a la aventura. Claro que al comienzo todo se veía difícil, nuevo, diferente y daba miedo. Pero ellos se animaron a más.
Estábamos listos. ¿Para qué? No lo sabíamos. Hoy se que estábamos listos para mucho y nada listos para otro mucho. Los chicos estaban felices al igual que nosotros
Bali fue mágico: Camila, Arturo, Benicio de 5 años y Blas de 3 se enamoraron de la isla. Los chicos comenzaron a ir al jardín sin hablar absolutamente nada de inglés. Hoy en día, son 4 personas completamente diferentes, los chicos hasta juegan entre ellos en inglés, Camila ya es una experta manejando motos y como familia están más unidos que nunca. Tienen una regla fundamental que es dedicar un tiempo en el día para cada uno, un momento especial para hacer lo que uno tenga ganas.
El animarse a lo desconocido los motivó a encontrar las herramientas que estaban buscando y se dieron cuenta que el mismo mundo era su escuela: los chicos podían aprender cada minuto algo nuevo, conocer nuevos paisajes, culturas, idiomas, climas, comidas.
Salimos de nuestra zona de confort para conocer el mundo, y en el proceso nos conocimos más, nos amamos más y descubrimos que todo lo que nos propongamos es posible
Estuvieron en la selva con orangutanes, nadaron con tiburones, bucearon con manta rayas, escalaron montañas, conocieron ciudades ‘a lo no turistas’, durmieron en lugares hermosos y en otros que dejaron mucho que desear. Después de recorrer Indonesia, visitaron Malasia, Singapur, Japón, China, Vietnam, Tailandia y Nueva Zelanda, país en el que están ahora. Su próximo destino será África!
No cambiaríamos ni un minuto de esta aventura por nada. Hoy, después de recorrer gran parte del sudeste asiático, hoy estamos en Nueva Zelanda y veremos qué nos depara el próximo destino, África
Camila y Arturo nunca habían tenido menos cosas materiales que en el presente y nunca antes se habían sentido sentido tan livianos y tan libres. Todo lo que tienen no está en sus mochilas sino en cada experiencia vivida.
Ellos tienen una frase que adoptaron como lema: enfrenta tu propio destino. Después de tantos miedos y dudas antes de salir a la aventura, Camila y Arturo hacen de su hogar cada nuevo lugar que conocen, porque el verdadero hogar es aquel en el que pueden estar los cuatro juntos.
