El Observatorio Astronómico de la Universidad Federal de Kazán, ubicado en la ciudad de Kazán, Rusia, ha sido incluido en la prestigiosa Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco. Este notable reconocimiento se hizo oficial durante las deliberaciones del Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco, que se llevaron a cabo en Riad, Arabia Saudita, durante el día de ayer.
El sitio que ahora forma parte del Patrimonio Mundial de la Unesco comprende el histórico Observatorio de Kazán, construido en 1837 en el corazón del centro histórico de la ciudad, junto con un complejo que alberga el Observatorio Astronómico suburbano Engelhardt y diversos edificios históricos.
Esta adición a la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco no fue la única de su tipo. Otros sitios notables que se incorporaron durante esta reunión incluyen el Parque Nacional de las Montañas Bale de Etiopía, que abarca una extensión de 1335 kilómetros cuadrados; la Maison Carrée de Nimes, un bien conservado templo romano en el sur de Francia; y Gordion, la antigua capital de Frigia en Turquía.
En días anteriores, se añadieron a esta distinguida lista el grupo de túmulos funerarios Gaya Tumuli, construidos por el Reino de Gaya, convirtiéndose en el sitio número 16 de Corea del Sur, así como las Fortalezas Anillo de la época vikinga en Dinamarca, que tienen más de 1.000 años de antigüedad.
Cabe mencionar que para que un sitio sea considerado para la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, debe ser evaluado como poseedor de un «valor universal excepcional«, según los criterios de la Unesco.
El Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco continuará revisando las nominaciones restantes, que incluyen el Hopewell Ceremonial Earthworks de Ohio, en los próximos días.
Sin embargo, vale la pena destacar que, la semana pasada, tres sitios en Ucrania -la Catedral de Santa Sofía y el complejo del monasterio Kyiv-Pechersk Lavra en la ciudad capital de Kyiv, y el centro histórico de Lviv en el oeste de Ucrania– fueron agregados a la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro debido a la amenaza de destrucción que representa la ofensiva rusa, según un comunicado de la Unesco. Estos lugares históricos también son vulnerables a las ondas de choque provocadas por los bombardeos en las dos ciudades.
