El Museo de Ciencia y Tecnología de Shanghai abrió su sector de astronomía al mundo esta semana. Ubicado en 390,000 metros cuadrados de espacio, está equipado con un observatorio, un planetario, mucho espacio para exhibiciones y un telescopio solar de 24 metros.
También tiene el récord de ser el museo dedicado a la astronomía más grande del mundo, según Ennead Architects.
Además de ser el más grande del mundo, el museo también es diferente a cualquier otro. Para empezar, no verá líneas rectas ni esquinas afiladas en ninguna parte del sitio. Desde sus inicios, el museo quiso resaltar su escala y ambición, que también refleja las aspiraciones del país de muchas maneras. En 2014, las autoridades del museo buscaron diseños a nivel mundial de diseñadores y arquitectos y finalmente seleccionaron a Ennead Architects, con sede en EE. UU., para su emblemático diseño.
«El edificio está destinado a ser esta encarnación de … arquitectura de inspiración astronómica», dijo Thomas Wong, el diseñador principal del proyecto. La firma llama al diseño una celebración del continuo del tiempo y el espacio, proporcionando un vínculo entre el rico pasado del país y las ambiciones futuristas en el campo de la ciencia.
El diseño del edificio tiene tres formas principales, un óculo, una cúpula invertida y la esfera, que representa el movimiento orbital, al mismo tiempo que sirve como instrumentos para las observaciones astronómicas dentro del museo.
El Oculus está suspendido sobre la entrada principal del museo y permite que la luz del sol caiga sobre la plaza central. Esto funciona como un reloj de sol, indicando a los visitantes la hora del día. Los entusiastas de la astronomía también podrían adivinar la estación y el solsticio utilizando los patrones de la luz solar.
La Esfera, una representación de los cuerpos celestes en el espacio, se asienta con un apoyo mínimo, lo que sugiere una suspensión ingrávida. Los visitantes pueden caminar por la mitad inferior de la esfera que también alberga el planetario del museo.
La cúpula invertida es una enorme estructura hecha de vidrio que ofrece a los visitantes una vista inminente del cielo, mientras enmascara cuidadosamente el horizonte de Shanghai. La cúpula anima a los visitantes a sumergirse en la experiencia real de ver el cielo nocturno, después de pasar tiempo de calidad mirando las exhibiciones y exhibiciones simuladas dentro del museo.
En esencia, el museo más grande del mundo tiene un solo propósito, ir más allá de la comunicación de contenido científico. Como dijo Wong a CNN, «Queremos que la gente comprenda la naturaleza especial de la Tierra como un lugar que alberga vida, a diferencia de cualquier otro lugar que conozcamos en el universo».
Un comentario
EXCELENTE, ES LO QUE NOS ESPERA EN EL FUTURO.