En India, según la ONG local Bachpan Bachao Andolan (BBA Save Childhood Movement), cada año desaparecen unos 500.000 niños en la nación asiática, la segunda más poblada del mundo después de China.
Esta cifra alertó al gobierno indio, que ha puesto en marcha una nueva estrategia para tratar esta problemática. Y ahí es donde apareció la tecnología para ayudar.
Desde el Ministerio de Desarrollo de la Mujer y el Niño, crearon una base de datos en línea llamada TrackChild en donde se pueden consultar las fotos de todos los menores desaparecidos.
El sistema cuenta con una enorme base de datos a nivel nacional con fotografías de los menores.
En ese sitio web se pueden consultar qué menores desaparecieron, cuáles han sido encontrados, denunciar nuevos casos y hacer consultas legales.
Este software se encarga de comparar de manera automática las imágenes de los niños desaparecidos con las de quienes llegan a hospitales, orfanatos y otras instituciones del país.
Los resultados son realmente increíbles: en tal solo cuatro días, el departamento de policía de Delhi logró ubicar a 2.930 niños y reunirlos de nuevo con sus familias durante el pasado mes de abril.
Y esta tecnología fue clave para encontrarlos. «Es casi imposible que alguien, de forma manual, revise las fotografías para ubicar a los niños desaparecidos», explicó Bhuwan Ribhu, activista de BBA, a medios locales.