Aplaudir al aterrizar puede parecer algo natural para muchos pasajeros, especialmente para quienes no vuelan con frecuencia. Este gesto, que recuerda a la ovación en un teatro, surge del alivio y la alegría de llegar a destino de manera segura. Pero la pregunta persiste: ¿es de buena educación hacerlo?

Según pilotos consultados de manera anónima, los aplausos no resultan molestos y, en muchos casos, son bien recibidos. Algunos explican que reflejan un sentimiento de gratitud hacia la tripulación, o incluso alivio después de momentos de turbulencia. En ciertas ocasiones, el gesto es espontáneo, ligado a vacaciones o a vuelos particularmente tensos, cuando todos “aguantan la respiración” hasta tocar tierra firme.
Sin embargo, expertos en viajes difieren. Para algunos, los aplausos no son necesarios y podrían considerarse de mala educación. Desde esta perspectiva, aterrizar correctamente es parte del trabajo de los pilotos, y no requiere reconocimiento adicional.
En la práctica, los profesionales coinciden en que las opiniones sobre aplaudir están divididas. Mientras que algunos disfrutan del gesto y lo ven como un acto de cortesía, otros lo consideran innecesario. En cualquier caso, lo cierto es que los aplausos rara vez afectan la operación del vuelo y, para muchos pasajeros, siguen siendo una manera espontánea de expresar alivio y felicidad por llegar sanos y salvos.



Un comentario
No me parecen de mala educación los aplausos al aterrizar el avión ✈️
Siempre un aplauso es un reconocimiento a un trabajo bien hecho.