En la presa de Monticello, ubicada en el Valle de Napa, California, ha aparecido un impresionante agujero con un diámetro de 22 metros. Al observarlo de cerca, podría dar la impresión de ser un fenómeno sobrenatural de origen desconocido o parecer que en cualquier momento podría surgir algo monstruoso de su interior. Sin embargo, esta apariencia engañosa contrasta con la realidad: se trata simplemente de un sistema de liberación de agua diseñado para funcionar cuando el nivel del embalse supera los 134 metros. En lugar de utilizar compuertas convencionales que se abren para evacuar el agua, como en la mayoría de las presas, aquí se optó por una solución diferente, creando un efecto óptico sorprendente.
Este fenómeno es denominado ‘Glory Hole’ y solo es visible cuando el sistema de liberación de agua está en acción. Durante el resto del tiempo, permanece inactivo y el agua embalsada se encuentra en un estado tranquilo. En principio, su activación debería ser un evento poco frecuente, ya que en California las lluvias son escasas y rara vez el nivel del embalse supera los 134 metros. Sin embargo, en los últimos años, ha entrado en funcionamiento con más frecuencia de lo esperado.
En los años 2006, 2017 y 2019, se pudo presenciar cómo el ‘Glory Hole’ absorbía agua del embalse para liberarla. Según señalan expertos en Science Alert, esto podría estar relacionado con el cambio climático: «Cuando los ingenieros lo construyeron en la década de 1950, solo esperaban usarlo una vez cada 50 años en situaciones extremas. Sin embargo, desde el cambio de siglo, el remolino se ha activado en tres ocasiones. Esto es otro indicio de que el clima de nuestro planeta está experimentando cambios».
Aunque este sistema de evacuación no es peligroso para las personas y cualquiera podría nadar fácilmente contra la corriente para escapar de él, el embalse está restringido al público. Cualquier actividad recreativa, como nadar o navegar, está estrictamente prohibida. Después de todo, estamos hablando de un inmenso agujero que puede absorber 1.3 millones de litros de agua por segundo.
La finalidad de esta barrera de seguridad también incluye prevenir una posible tragedia. Cuando el sistema se activó en 2017, se congregaron cientos de personas alrededor de la presa, asombradas por el funcionamiento de ese inmenso agujero, según informaron medios locales. Aunque no ocurrió ningún incidente en esa ocasión, las autoridades han optado por tomar precauciones y evitar que nadie se acerque, con el fin de disuadir cualquier tentación que algunas personas puedan tener de lanzarse al agua.
De hecho, ya se había registrado un incidente similar en 1997. En aquel año, una mujer ingresó al embalse y nadó hacia el agujero mientras este estaba en funcionamiento. Una corriente de agua la atrapó y logró aferrarse al borde de la estructura durante aproximadamente 20 minutos para evitar ser arrastrada, pero lamentablemente no tuvo éxito. Horas después, los equipos de rescate encontraron su cuerpo sin vida. A raíz de este trágico accidente y viendo la gran cantidad de curiosos que se congregaron alrededor de la presa en 2017, se tomó la decisión de acordonar la zona. En una época en la que muchas personas asumen riesgos para obtener notoriedad en las redes sociales, las autoridades han priorizado la prevención sobre la curación.