Una nueva generación llegó para despertar a la sociedad y mostrarnos, una vez más, cuáles son las verdaderas prioridades. Y una de ellas es salvar al planeta.
Un niño llamado Connor Berryhill decidió fundar su propia organización para limpiar y proteger nuestras playas.
Todo comenzó durante un viaje a Hawái, cuando Connor vio una foca mientras caminaba por la playa. Muy curioso, el niño comenzó a investigar sobre esta especie en peligro de extinción y, al ver los peligros a los que sometían los animales, decidió poner un granito de arena para limpiar los océanos lo más posible.
Su causa inspiró a muchos más niños a seguirlo y compartir sus misiones, limpiando con sus propias manos la basura en las playas.
Ahora con 11 años, el niño de California tiene su propia organización sin fines de lucro para llevar su misión a gran escala. El gran Connor dice estar creando “la próxima generación de guerreros del océanos” con MicroActivist.
Además de sus actividades limpiando las playas, su fundación también ofrece módulos educativos para el aula. La organización también ha creado Micro-Movies, que muestran videos y películas del mundo submarino, y una colección de libros.
“Las limpiezas de la playa de MicroActivist eliminan la basura de la playa, pero también hacen que los niños se enamoren del océano y se conviertan en guerreros del océano para siempre!”, escribió en su página.
Tiene 9 años y se dedica a cultivar alimentos y construir viviendas para personas sin hogar
Un ejemplo: cuando Hailey Fort tenía 5 años y paseaba con su madre por las calles de Washington, un hombre sin hogar captó su atención y le preguntó a su madre si lo podía ayudar.
Su madre compró un almuerzo, se lo regalaron, y ese simple gesto, cambió la vida de la pequeña para siempre.