De acuerdo a lo indicado por medios locales, los fanáticos de la serie de televisión sudcoreana Crash Landing on You han llegado a Suiza desde diferentes países de Asia. La afluencia es superior a lo que el apacible pueblo de Iseltwald puede soportar: este mismo escenario ha provocado irritación entre lugareños y funcionarios del sector turístico.
La comuna suiza en cuestión es Iseltwald, lugar donde se filmó parte del drama romántico sudcoreano de Netflix ‘Crash Landing On You’. Precisamente, Iseltwald es una comuna suiza del cantón de Berna situada en el distrito administrativo de Interlaken-Oberhasli. Limita al norte con Niederried bei Interlaken y Oberried am Brienzersee, al este con Brienz, al sur con Grindelwald, y al oeste con Lütschental, Gündlischwand y Bönigen.
Conocido como el pueblo del embarcadero junto al Lago Brienz, si bien este destino no es particularmente de los más atractivos de Suiza, lo cierto es que se trata de un rincón tranquilo y austero, ideal para quienes buscan una vida llevadera y alejada de toda masificación. Este fenómeno parece verse en riesgo luego de que la serie de Netflix llevara su nombre a miles y miles de usuarios.
¿De qué se trata la serie Crash Landing on You?
A juzgar por la sinopsis disponible en Internet, Crash Landing on You cuenta la historia de una heredera surcoreana que sufre un accidente en parapente en Corea del Norte. La trama narrativa se completa de la mano de un oficial del ejército que decide ayudarla a esconderse.
Un muelle dispuesto en Iseltwald parece ser el destino final de un viaje que para algunos fanáticos comenzó antes, más precisamente en Corea o Vietnam. Allí es donde se filmó la escena en la que uno de los personajes principales de Crash Landing on You toca el piano cuando una chica de la que se enamora llega en un ferry desde Interlaken. Desde entonces, la ubicación se ha convertido en un lugar de visita obligada para los fanáticos de la serie.
Según ha trascendido, por ese muelle, cuya proporción es de 1,5 metros de ancho y siete metros de largo, esperan una decena de turistas para acceder a él y tomarse fotografías. Durante todo el día, grupos de unas diez personas giran en torno al sitio.
Los locales observan cómo se disponen con trípodes, palos para selfis e incluso drones. De vez en cuando acercan la cara a la cámara para comprobar las tomas. Cuando llega el próximo autobús poco más tarde, más personas se unen a la fila.
La prensa suiza informó que en su punto máximo en agosto, llegaron hasta 12 grandes autobuses turísticos por día. Esta afluencia inesperada ha perturbado hasta el funcionamiento de una línea de autobuses habitualmente tranquila. Desafortunadamente, los locales que gozaban de una tranquilidad inédita parecen tener motivos de sobra para estar hastiados de este imprevisto éxodo turístico.
Según el medio suizo swissinfo.ch, «en Iseltwald existe una preocupación generalizada de que la región no se beneficie financieramente y la comuna solamente termine recogiendo la basura. A los residentes también les preocupa que la afluencia ahuyente a los turistas habituales que acuden en busca de paz y tranquilidad».
