Lo que prometía ser el inicio de unas vacaciones soñadas acabó en un episodio digno de una película. Un vuelo de Enter Air, que despegó de Katowice (Polonia) rumbo a Marsa Alam (Egipto), se convirtió en el escenario de una fiesta descontrolada que terminó con peleas, insultos y un piloto obligado a bloquear las puertas tras aterrizar.
Según relataron testigos, todo comenzó cuando un grupo de pasajeros decidió armar su propio festejo a bordo, sin importar las advertencias de la tripulación. El alcohol corría sin límites y el ambiente festivo rápidamente se tornó violento. Gritos, empujones y agresiones físicas llevaron al personal a alertar al comandante, quien tomó una decisión extrema: nadie bajaba del avión hasta que llegaran las autoridades.

El vuelo, que llevaba casi 200 pasajeros, terminó siendo retenido en tierra mientras las fuerzas de seguridad tomaban control de la situación. Varios pasajeros ahora enfrentan consecuencias legales tanto en Polonia como en Egipto, además de la posibilidad de ser incluidos en la lista negra de la aerolínea, lo que les impediría volar nuevamente con Enter Air.
Desde la compañía recordaron que estos comportamientos no son aislados, pero siempre tienen un alto costo: prohibiciones de vuelo, multas y sanciones que pueden arruinar futuros viajes. “Muchos terminan suplicando que los borremos de la lista negra… pero las reglas son claras”, señalaron desde la aerolínea.

Este incidente vuelve a poner en el centro de la discusión el consumo de alcohol en los vuelos y la necesidad de mayores controles para garantizar la seguridad en el aire.