La Gran Barrera de Coral, en Australia, ya perdió más de la mitad de sus corales en los últimos 25 años como consecuencia del calentamiento climático y su impacto en el agua, y es posible que su capacidad para recuperarse se encuentre comprometida.
Según un estudio realizado por el Centro de Excelencia para el Estudio de los Arrecifes de Coral, se registra una disminución en las comunidades de coral y el tamaño de sus colonias así como también en el tamaño de la Gran Barrera de Coral entre 1995 y 2017. Según informó el profesor Terry Hughes, las altos niveles de temperatura que fueron registrados y que rompieron récords generaron eventos de blanqueamiento en 2016 y 2017. Esto último significó un impacto directo en la población de los corales. «Esto significa que la resiliencia del arrecife, su capacidad de recuperarse de los eventos recurrentes de blanqueamiento masivo, ha sido comprometida«, declaró el profesor según informó la agencia de noticias Reuters.
La Gran Barrera de Coral es el arrecife de coral más grande del mundo. Consta de aproximadamente 2.300 kilómetros y aloja a más de 1500 especies de peces, más de 400 especies de coral y alrededor de 4.000 tipos de moluscos. A partir de 1981 se incluyó en la lista de patrimonio mundial de la UNESCO como el ecosistema de arrecife de coral más grande y espectacular del planeta. «Encontramos que la cantidad de pequeños, medianos y grandes corales en la Gran Barrera de Coral se ha reducido en más del 50% desde 1990«, declaró Hughes. Respecto al impacto que esto puede tener, los arrecifes son fundamentales para la salud de los ecosistemas marinos ya que son los que previenen que estos colapsen.
«Solíamos pensar que la Gran Barrera de Coral está protegida por su tamaño, pero nuestros resultados muestras que incluso el sistema de arrecifes más grande del mundo y relativamente bien protegido está comprometido y en declive«, agregó el profesor Hughes. La disminución de los corales, tanto pequeños como medianos y grandes, tuvo lugar en aguas superficiales y en aguas profundas de todo el arrecife. Según el estudio, los más afectados fueron los corales con asta de ciervo y los planos.