En un giro sorprendente y audaz, el gobierno japonés está lanzando su propia app de citas en Tokio, en un esfuerzo desesperado por combatir la alarmante baja natalidad del país. En un intento por alentar a los japoneses a relacionarse más y, eventualmente, aumentar la tasa de nacimientos, esta aplicación se convierte en una pieza central de las estrategias demográficas del gobierno.
La preocupante caída en las cifras de nacimientos, acompañada por sus posibles repercusiones demográficas y económicas, ha llevado a las autoridades a tomar medidas innovadoras. Entre ellas, la app de citas se destaca como una solución tecnológica para un problema profundamente social.
¿Cómo funcionará esta revolucionaria app?
Para registrarse, los usuarios deberán presentar documentos que prueben su soltería y firmar una declaración de intención de casarse. Además, se solicitará un comprobante de impuestos que demuestre el salario anual, y los aspirantes deberán pasar por una entrevista para verificar su identidad.
Desde finales de 2023, la app ha estado en fase de prueba, y los responsables del proyecto han declarado: «Sabemos que el 70% de la gente que quiere casarse no participa activamente en eventos o con aplicaciones para encontrar pareja y queremos darles un pequeño empujón para que la encuentren».
Una crisis que trasciende fronteras
La situación en Japón es crítica. En 2023, por octavo año consecutivo, el país experimentó una caída del 5.1% en nacimientos, registrando solo 758,631 bebés mientras que 1,590,503 personas fallecieron. Además, la población envejece rápidamente, con una de cada diez personas superando los 80 años, convirtiendo a Japón en el país con más ancianos del mundo.
Las consecuencias de este fenómeno podrían ser devastadoras: un aumento en los costos sociales y un estancamiento económico significativo son solo algunas de las preocupaciones. Eventos sociales organizados por las autoridades complementan la app, buscando fomentar relaciones y enfrentar este desafío de manera integral.
El debate está abierto
Mientras el gobierno japonés apuesta por esta innovadora app de citas como una solución parcial a la bomba demográfica, la pregunta queda en el aire: ¿Es esta realmente la clave para revertir la tendencia de baja natalidad en Japón?