Torre Loizaga es una casa torre renovada y un museo del automóvil, ubicado en Concejuelo de Galdames, Vizcaya, en el País Vasco. En este post te contamos cómo es por dentro.
Las postales que registran esta curiosa colección europea muestran una fusión digna de admirar entre fortaleza y vehículos de época insuperables: la Torre Loizaga alberga la única colección europea que cuenta con todos los modelos de la marca Rolls-Royce, que incluyen desde los vehículos de los años 1910 hasta 1990.
Se trata de una colección que tiene lugar en una particular propiedad situada en la comarca de Enkarterri, al suroeste de Bilbao, destino del cual mantiene una distancia de tan solo 15 minutos. Además de la posibilidad de admirarlos a todos juntos, también se los puede apreciar conservados en perfecto estado y listos para ser puestos en marcha en cualquier momento.
Enkarterri o Las Encartaciones, en castellano, se encuentra en la parte más occidental de Vizkaya, sitio que destaca en su entorno natural por la presencia de cumbres y valles, tanto así como también imponentes vistas panorámicas. A decir verdad, no son solo los Rolls-Royce los que hacen de este spot un lugar sumamente bello: la fortaleza de Torre Loizaga, antiguo bastión defensivo del siglo XIV, revela una historia 100% emocionante.
Hoy en día, es considerada una de las joyas del patrimonio cultural de Bizkaia, por su legado único y atractivo histórico y arquitectónico. Desde hace ya tiempo, este espacio fue rescatado de sus ruinas por el empresario y coleccionista originario de Galdames, Miguel de la Vía, que además podríamos definir como un verdadero enamorado de los coches antiguos.
¿Qué se puede ver en ella? La Torre Loizaga presenta seis pabellones que permiten al visitante disfrutar de auténticas joyas de los automóviles de lujo de época. Desde turismo de Enkarterri describen: «Las 45 unidades que constituyen el legado de Rolls-Royce se complementan con una treintena de prestigiosos vehículos europeos y americanos que repasan los avances tecnológicos y el impacto que los coches han tenido en la sociedad, en la cultura y en la economía a lo largo de más de cien años, así como la del concepto del lujo, en el siglo XX”.