Paraguay es un país muchas veces olvidado por los viajeros que recorren Sudamérica, opacado por monstruosidades turísticas como Perú, Brasil o Argentina, pero que esconde diversos lugares que recorrer. En este post te contaremos cuáles son los mejores lugares que visitar en Paraguay y cómo hacer para visitarlos en tu próximo recorrido.
1. Asunción
La capital paraguaya es uno de los lugares que más visitas recibe, a pesar de encontrarse aun en período de recuperación de la ciudad, de los espacios abiertos y de los edificios históricos. A pesar de su triste pasado, muchos de ellos pueden parecer a medio construir pero, en realidad, son edificios pertenecientes al patrimonio de la ciudad, lo que hacen que se preserven tal cual se encuentran.
Qué ver en Asunción:
- El centro histórico con sus construcciones históricas, palacios y la casa de la independencia.
- Los puestos de artesanos y gastronómicos a lo largo de toda la ciudad
- El barrio Loma de San Jerónimo, uno de los barrios más turísticos, muy parecido al colorido Caminito de la Ciudad de Buenos Aires, repleto de cafeterías, bares y miradores escondidos.
- El Barrio Villa Mora, ideal para un restaurante de lujo o para disfrutar de la vida nocturna de Asunción.
2. Encarnación
Conocida como la “perla del sur” de Paraguay, Encarnación es una pequeña ciudad que limita con la ciudad de Posadas, en Argentina. Este es el lugar elegido por los locales para darse un baño refrescante ya que Paraguay es un país mediterráneo, es decir, no tiene salida al mar, lo que hace que la playa sea fluvial y se encuentra allí, en Encarnación.
Lo mejor: visitar Encarnación en época de Carnaval, donde las calles se tiñen de colores y alegría.
3. Misiones jesuíticas de la Santísima Trinidad de Paraná
Visitar Paraguay implica también transportarse en el tiempo hacia las épocas de las Misiones Jesuíticas, hoy en día ruinas que quedaron en pie de los tiempos de evangelización por parte de la congregación y que demuestran el pasado colonial español.
En Paraguay, se sitúan las Misiones Jesuíticas de la Santísima Trinidad de Paraná, a solo 28 kilómetros de la ciudad de Encarnación, construidas en el Siglo XVII y a partir del año 1993, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. A pesar del paso del tiempo, las antiguas misiones son las mejor conservadas en todo el país, tanto la plaza principal como la Iglesia Mayor con estatuas y hasta el púlpito de piedra.
4. Yaguarón
Una pequeña localidad con mucha historia, leyendas y hasta encuentros sobrenaturales, se encuentra a solamente 48 kilómetros de Asunción y es el lugar perfecto para los amantes de las teorías, curiosidades y pueblos fantasma. Los propios pobladores fueron los encargados de la construcción del Templo de San Buenaventura, construido en el Siglo XVIII y de suma importancia en la zona incluso al día de hoy.
Lo mejor: el cerro Yaguarón, donde se pueden ver vistas panorámicas de la vasta vegetación y hasta probar la suerte y fortuna. Cómo? Según la leyenda, si los pies de los viajeros encajan en las huellas de Santo Tomás durante un viernes Santo, siempre abundará la fortuna y el amor.
5. Tobatí
Este es el sitio ideal para los amantes del turismo aventura: escalada, trekking, rapel. Todas esas actividades, sumado al descanso en las posadas, se pueden realizar en Tobatí, ubicado a pocas horas de Asunción. Tobatí cuenta con cerros y saltos que son ideales para pasar un día (o varios) en contacto con la naturaleza y a través de actividades para todos los gustos.
6. Ciudad del Este
Para todos aquellos viajeros que disfrutan de las compras, Ciudad del Este es el lugar ideal para practicar lo que se conoce como BBB (bueno, bonito y barato, un gran término, ¿verdad?). En la Triple Frontera, el punto compartido entre Paraguay, Brasil y Argentina se emplaza Ciudad del Este con precios sumamente baratos, ideales para comprar electrodomésticos y aparatos electrónicos.
Cuidado: no todos los mercados son legales, por lo que hay que tener precaución al momento de comprar porque puede no tener devolución.
7. San Bernardino
Aunque Paraguay sea un país mediterráneo, no impide que existan lugares donde descansar frente al rio en los centros de veraneo y balnearios. San Bernardino es uno de ellos y muy elegido por los propios turistas paraguayos, quienes lo visitan gracias a sus facilidades turísticas y su encanto por parte de un pueblo colonial, antiguo asentamiento de colonias alemanas y suizas a fines del siglo XIX. Todo el pueblo cuenta con pequeños restaurantes muy pintorescos, ideales para disfrutar observando el agua y descansando.
Paraguay, un lugar donde muchos preguntan “y qué hay para hacer?” que termina sorprendiendo a los viajeros gracias a la diversidad de ofertas naturales e históricas, ideal para un viaje diferente.