Ginebra se encuentra ubicada en la salida del río Ródano y ostenta con orgullo una de las mejores vistas de la cordillera de los Alpes, aunque también es famosa por ser una ciudad experta en fabricación de relojes, por albergar la sede de la ONU y por ser exportadores del mejor chocolate del mundo.
Por esto y mucho más, esta hermosa metrópoli merece un artículo dedicado enteramente a las atracciones más importantes que posee, ¡y aquí lo traemos! En las siguientes líneas encontrarás una fina selección de aquellos lugares de Ginebra que no puedes perderte en tu primer viaje a Suiza, ¿ya has tomado lápiz y papel para tomar nota?
¿Cuáles son los mejores lugares de Ginebra?
1. Conoce la Catedral de San Pedro
Uno de los primeros lugares de Ginebra que te recomendamos visitar es la Catedral de San Pedro. Construida en diferentes estilos y ostentando una espectacular fachada neoclásica, es uno de los sitios más emblemáticos de la ciudad. Su edificación comenzó alrededor del siglo XII y fue conocida por albergar a Juan Calvino, uno de los líderes más importantes de la Reforma Protestante. Interesante comienzo, ¿no?
Su interior protege una silla de madera utilizada por el fallecido prócer, además de la mayor colección de capiteles románicos y góticos de Suiza y unas imponentes vidrieras que datan del siglo XIV.
Cuando vayas, no olvides bajar al subsuelo para admirar los restos de las primeras iglesias que fueron construidas en esta ubicación. También asegúrate de subir los 157 de la torre principal, que te llevará a un mirador que regala las mejores vistas de la ciudad, del lago y de los Alpes, ¡no olvides tu cámara fotográfica!
2. Recorre el centro histórico
Alrededor de la Catedral de San Pedro se encuentra el centro histórico, uno de los lugares de Ginebra más importantes y antiguos.
Anímate a perderte por las pequeñas calles empedradas como la Rue de l’Hôtel-de-Ville y la Grand-Rue, conocidas por ser las más pintorescas y relevantes del centro histórico, a descubrir las plazas más bonitas como la Place du Bourg-de-Four o la Place du Molard, a sentarte a relajarte en cafés antiquísimos pero hermosos, a entrar en tiendas de antigüedades y a conocer las galerías de arte más interesantes, ¡alucinarás con todo lo que este sitio tiene para ofrecerte!
3. Visita la Maison Tavel
Dentro del centro histórico se encuentra la Maison Tavel: se trata de la casa privada más antigua de la ciudad y, en consecuencia, uno de los lugares de Ginebra más viejos y misteriosos.
Esta construcción medieval perteneciente a una familia muy poderosa de la ciudad fue destruida en 1334 debido a un incendio, pero desde 1986 funciona como un museo que exhibe la vida cotidiana de Ginebra y la constante evolución que ha experimentado desde la Edad Media hasta la actualidad. En una de las habitaciones de la casa encontrarás una gran maqueta que muestra el diseño de la ciudad en 1850, ¡es muy interesante observar las diferencias arquitectónicas!
4. Pasa el rato en el Parc des Bastions
Ubicado a los pies del centro histórico y a pocos metros de la Place de Neuve, el Parc des Bastions representa uno de los lugares de Ginebra más importantes. El punto más destacado del parque es el Muro de la Reforma, construido a principios del siglo XX con el objetivo de recordar a las personas que ayudaron a crear y difundir la Reforma y el protestantismo como Calvino, John Knox, Farel y Teodoro de Beza.
Pero además del muro, el parque es un buen lugar para ir a pasear, hacer un picnic y alejarse un poco del bullicio que caracteriza a la ciudad. Para llegar hasta aquí deberás atravesar la Place de Neuve; podrás reconocerla porque alberga varios edificios como el Conservatorio de Música, el Museo Rath y el Gran Teatro (¡otras atracciones que no puedes perderte!).
5. Pasea por el barrio de Carouge
A menos de 10 minutos en tranvía del centro histórico se encuentra Carouge, que forma parte de esta lista de lugares de Ginebra imperdibles gracias al encanto que destila.
También conocido como el Barrio Italiano, Carouge solía ser en el pasado una ciudad independiente de Ginebra y le pertenecía a los antiguos duques de Saboya, quienes se encargaron de contratar a los mejores arquitectos de nacionalidad italiana para diseñar una ciudad bien mediterránea al estilo de Niza.
Entre los puntos más destacados se encuentran la Place du Marché, en donde cada miércoles se arma un mercado de frutas y verduras frescas, la calle St-Joseph con sus paraguas flotando en el cielo, y la orilla del río Arve, ideal para pasear en bicicleta o caminar mientras disfrutas de la brisa costera.
6. Admira la Jet d’Eau
La fuente Jet d’Eau está ubicada en el embarcadero de Eaux Vive, lanza chorros de agua que pueden alcanzar hasta los 140 metros de altura y es uno de los lugares de Ginebra más famosos y emblemáticos.
Los reportes establecen que fue construida en 1886 con la intención de funcionar como válvula de seguridad de una red de energía hidráulica, pero en 1891 fue trasladada a su ubicación actual con el objetivo de que los visitantes puedan impactarse con su potencia. El chorro de agua es expulsado con una velocidad de 200 kilómetros por hora y es por eso que puede alcanzar una altura tan impresionante. Es posible admirarla desde muchos puntos y es considerada una de las fuentes de agua más grandes del mundo.
Una buena manera de llegar hasta aquí y, de paso, aprovechar para conocer la ciudad, es reservando este tour panorámico por Ginebra. ¡Lleva una toalla por las dudas!
7. Relájate en Bains des Pâquis
Localizado en un muelle a pocos metros de Jet d’Eau, Bains des Pâquis es uno de los lugares de Ginebra más cálidos y tranquilos. Aquí es donde tanto locales como turistas se reúnen para tomar sol, disfrutar de las vistas de la ciudad y del lago Lemán, bañarse en la piscina si hace calor o meterse en el sauna cuando hace frío y más, ¡todo mientras toman una deliciosa cerveza o comparten una exquisita fondue que, según dicen por ahí, es la más exquisita de la ciudad!
8. Explora la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU)
El Palacio de las Naciones alberga la sede de la ONU más importante después de la de Nueva York y es por eso que merece un lugar en este TOP 10 de los lugares de Ginebra que todos deben visitar alguna vez.
Situado en el Parque Ariana frente a la Plaza de las Naciones, este enorme edificio tiene la particularidad de estar completamente blindado y solo es posible ver las banderas de los 193 estados que forman parte de la Organización de las Naciones Unidas y el palacio de lejos. Si quieres visitarla, te recomendamos reservar tu lugar con antelación ingresando en esta página: este tour guiado es la única manera de ingresar al edificio y a sus alrededores, así que no olvides completar el formulario.
En los alrededores de la sede podrás ver sitios con mucha relevancia histórica como el Museo Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, otros de los lugares de Ginebra que recomendamos visitar, sobre todo si cuentas con tiempo extra en la ciudad.
Para llegar hasta esta zona sin gastar mucho dinero te recomendamos reservar tu lugar en el autobús turístico de Ginebra: en él recorrerás los puntos más importantes de la urbanización y tiene parada en la sede de la ONU.
9. Observa La Jonction
A unos 20 minutos paseando por la orilla del río Ródano o a 10 minutos de viaje en tranvía encontrarás La Jonction, el punto exacto donde el río Arve se encuentra con el río Ródano. Si subes al viaducto situado frente a La Jonction, podrás ver cómo se unen las corrientes de los dos ríos y se fusionan sus aguas, cuyos colores son extremadamente contrastantes.
Parece una tontería, pero es uno de los lugares de Ginebra más visitados gracias a este interesante fenómeno natural. ¡Pero eso no es todo! La Jonction se ha transformado también en el sitio perfecto para ir a pasar el día: está acondicionado con hamacas, plataformas de madera y tumbonas para tomar sol.
10. Camina por el Jardín Inglés
A orillas del lago Lemán se encuentra el Jardín Inglés, uno de los lugares de Ginebra más verdes y naturales. Este es el sitio perfecto para relajarte y desconectar un poco de la estresante y bulliciosa vida en la ciudad.
El lugar más visitado del parque es el Reloj de Flores, creado con la intención de homenajear a la industria relojera de Suiza que es tan famosa tanto a nivel nacional como internacional. Este reloj de cinco metros de diámetro está formado por plantas y flores de todo tipo que se van cambiando en cada estación del año. Además, es conocido por ser uno de los relojes más precisos del mundo gracias a que se encuentra conectado a un satélite que ajusta la hora. Otros dos puntos que no puedes dejar de visitar cuando vayas al Jardín Inglés son el Monumento Nacional, dos estatuas de bronce que representan la reunificación de Ginebra con Suiza, y la fuente Quatre-Saisons.