Lionel Messi gastó 35 millones de dólares en un hotel que ya tenía una orden de demolición y ahora debe ser derribado porque sus balcones son demasiado grandes.
El periódico español El Confidencial informa que el Hotel MiM Sitges de 77 habitaciones, que está situado cerca de la playa y del paseo marítimo de Sitges, al suroeste de Barcelona, no cumple con los estándares de construcción requeridos.
Messi compró el edificio en 2017 por 35 millones de dólares, momento en el que su demolición ya había sido aprobada por el Ayuntamiento de Sitges, dice el diario.
El Confidencial dice que la estrella del fútbol argentino no estaba al tanto de la orden de demolición hasta que la publicación se acercó a él para que comentara.
Además de que los balcones del hotel son demasiado grandes, cualquier intento de eliminarlos o reducirlos podría provocar el colapso del hotel, según El Confidencial, lo que significa que la única forma de proceder es demoler todo el edificio.
Sin embargo, no todo ha sido pesimismo para Messi, que también es propietario de hoteles en Ibiza y Mallorca, la semana pasada.
El lunes pasado, el delantero del Paris Saint Germain recogió el Balón de Oro por séptima vez récord tras una impresionante temporada 2020/21 para el FC Barcelona y su país.
El jugador de 34 años llevó a Argentina a la Copa América en el verano y terminó como el máximo goleador de La Liga la pasada temporada con 30 goles.
En su discurso de aceptación, Messi rindió homenaje al delantero del Bayern de Múnich, Robert Lewandowski, quien terminó segundo y dijo que el polaco debería recibir el premio del año pasado de manera retroactiva, que fue cancelado debido a la pandemia de coronavirus.
«Creo que France Football debería otorgarte tu Balón de Oro 2020, te lo mereces», dijo Messi sobre el delantero, que marcó 55 goles durante la campaña 2019/20 cuando el Bayern ganó un triplete.
Desde entonces, Lewandowski criticó a Messi por sus comentarios, calificando sus palabras de «vacías».
«No estoy tan entusiasmado con recibir el premio 2020», dijo.
