Laura Merry, una pasajera que viajaba con Qantas, tuvo que encerrarse en el baño del avión cuando la tripulación de la cabina insistió en servir frutos secos a pesar de haber sido alertada de su mortal alergia a las nueces.

Las azafatas le notificaron que servirían frutos secos, lo que la pondría en riesgo de sufrir un shock anafiláctico, por lo que le recomendaron aislase en el baño.

Qantas Australia tuvo conocimiento de mi alergia a las nueces meses antes de mi reserva y había escrito documentos para confirmar que no servirían frutos secos a bordo.

Con la aerolínea notificada, la pasajera pensó que no tendría ningun inconveniente. Pero cuando abordó el avión el 3 de marzo, la actitud del gerente de cabina hacia mi alergia fue horrible. Le dijeron que no habían sido notificados y que era tarde para hacer cualquier tipo de petición.

Como si eso fuera poco, los asistentes de vuelo se negaron a hacer un anuncio a los pasajeros sobre su alergia y le informaron que servirían como snack frutos secos, remarcando que no podían evitar servirlos.

Durante el vuelo de Qantas, le dieron una máscara para usar como solución y se tuvo que aislaren el baño para alejarse de todos los que comían estos bocadillos a mi alrededor.

Qantas salió a decir que ellos se encargaron de retirar todo, pero que «no puede garantizar un ambiente libre de alergias».

Casi muere por comer un shawarma de pollo en un vuelo de British Airways

Se vivieron momentos de pánico durante un vuelo de Dubai a Londres de la aerolínea British Airways,cuando una mujer sufrió un shock anafiláctico que la que dejó sin respirar durante varios segundos.

Sonia Bagga viajaba junto a su marido y sus 2 hijos. La familia regresaba a su hogar en Londres y antes de embarcar, la mujer le advirtió a la tripulación sobre su alergia. Continuar leyendo…