Paul Rose, un ecologista del comportamiento de la Universidad de Exeter, se encargó de investigar si los flamencos forman vínculos estrechos entre sí en la naturaleza.
Ya se trate de amigos del mismo sexo, parejas de apareamiento o grupos de tres a seis, los pájaros de plumas rosas no se enredan cuando se trata de relaciones: cuando eligen a alguien, lo hacen a largo plazo.
Los datos de Rose, recopilados entre 2012 y 2016 a partir de bandadas caribeñas, chilenas, andinas y menores que viven en el Wildfowl and Wetlands Slimbridge Wetland Center de Gloucestershire, encontraron que los flamencos mantienen fuertes lazos que pueden durar décadas, y esto a menudo se muestra cuando se apiñan muy juntos.
Rose le dijo a National Geographic: ‘El hecho de que sean tan duraderas sugiere que estas relaciones son importantes para la supervivencia en la naturaleza’. Para evaluar adecuadamente qué tan fuertes son las amistades entre bandadas específicas, Rose las fotografió a diario durante las cuatro estaciones para tener registro de los que se unían con regularidad.
Por ejemplo, dijo «había dos hembras mayores fuertemente vinculadas que hacían de todo, desde exhibiciones de cortejo hasta construir sus nidos juntas, y siempre se les unía un macho 20 años menor que ellas». Si ves dos flamencos a «menos de un cuello de distancia» el uno del otro, lo más probable es que sean amigos.
Al comentar sobre cómo las aves eligieron realmente a sus parejas, Rose dijo: ‘Parece que se trata más de encontrar a alguien con una personalidad similar, alguien con quien no choques. Las bandadas son ruidosas y están ocupadas, y probablemente las aves no necesiten más estrés. Tener un amigo es bueno para tu bienestar … una forma de reducir el estrés y las peleas es evitar las aves con las que no te llevas bien’.
Rose también señaló que debido a la importancia fundamental de la amistad para los flamencos, los propietarios de los zoológicos deben tener cuidado de separar a los que están «estrechamente vinculados». Desde entonces, su estudio completo se ha publicado en la edición de junio de Behavioral Processes.
La próxima vez que veas una pareja de flamencos debes saber que probablemente sean mejores amigos.
