Casi la mitad de la población de 50,000 koalas que vivían en Kangaroo Island (o la Isla Canguro) han muerto en medio de los incendios forestales en Australia.
Miles de koalas y canguros fallecidos gravemente quemados fueron encontrados esparcidos a lo largo del costado del camino después de que intentaron desesperadamente escapar del incendio en el Parque Nacional Flinders Chase.
La isla Canguro, una turística zona natural frente a las costas del estado de Australia del Sur, es el hogar de muchas especies nativas, entre ellas los koalas, cuya población se estima en 50 mil individuos.
En los últimos días, las condiciones han empeorado. Un incendio se propagó rápidamente en la isla Canguro y arrasó el viernes 170 mil hectáreas, una tercera parte de la isla.
Los trabajadores del Kangaroo Island Wildlife Park están buscando a animales que puedan estar vivos todavía en el parque.
Los catastróficos incendios que asuelan el sudeste del país desde hace cuatro meses han matado a cientos de miles de animales nativos solo en el estado de Nueva Gales del Sur.
Según un estudio de la Universidad de Adelaida publicado en julio, los koalas de la isla Canguro son especialmente importantes para la supervivencia de la especie en estado salvaje ya que son el único grupo importante que no sufre de clamidia, una infección bacteriana asintomática que puede provocar ceguera, esterilidad y la muerte.
Los expertos se mostraron realmente preocupados de que la vida silvestre nativa tarde muchos años en recuperarse en la isla.
Al menos 24 personas han muerto en los incendios desde que comenzaron en septiembre, y más de 100 incendios continúan ardiendo en los estados de Nueva Gales del Sur y Victoria solamente.
Más de 1,500 casas han sido devastadas y más de 3.6 millones de hectáreas de tierra, matando a casi medio billón de animales en el proceso.
El primer ministro australiano Scott Morrison ha sido criticado por activistas por no reconocer el papel del cambio climático en los incendios.
Un canguro herido por los incendios en Australia fue a pedirle ayuda a un niño y se dieron la mano
Sin dudas, Australia se enfrenta a una de las peores catástrofes naturales que hayan tenido registro en la historia.
Aún hay más de 300 focos de incendio que continúan emitiendo fuego. Más de 500 millones de animales muertos, habitantes de más de 1.500 hogares y turistas en las zonas cercanas a los incendios debieron ser evacuados.