Aunque Machu Picchu suele ser sinónimo de turismo en Perú, los datos oficiales de 2025 revelaron una sorpresa: el atractivo más visitado del país no fue la ciudadela inca, sino el Circuito Mágico de las Aguas, en Lima, que lideró el ranking nacional de visitas entre enero y septiembre de este año.
Según informó el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), el turismo peruano continúa con una recuperación sostenida, registrando un crecimiento del 4,6% en la llegada de turistas internacionales en comparación con 2024. Esta tendencia confirma la reactivación del sector, aunque todavía se camina hacia los niveles previos a la pandemia.
El Circuito Mágico de las Aguas alcanzó 1.845.086 visitantes, lo que representa una recuperación del 88,7% respecto a 2019, aunque con una variación interanual negativa del 19,8%. La mayoría del público fue local: el 95,4% correspondió a turistas nacionales (1.760.465 personas), mientras que solo el 4,6% fueron extranjeros (84.621 visitantes). Este fenómeno refuerza el rol del turismo interno como motor clave de la economía peruana.

En segundo lugar se ubicó el Santuario Histórico de Machu Picchu, que registró 1.170.389 visitas, mostrando un incremento del 3% interanual, con 34.000 nuevos ingresos respecto al año anterior. A diferencia del Circuito del Agua, Machu Picchu concentró principalmente turismo extranjero, ya que el 78,4% de las visitas fueron internacionales (917.419) y el 21,6% nacionales (252.970), lo que reafirma su condición como el principal imán para visitantes del exterior.
Otros destinos también tuvieron un desempeño destacado en 2025. La Explanada de Saqsaywaman, en Cusco, recibió 720.244 visitantes, cifra que significa un crecimiento del 3,1% interanual y que supera en 18,9% los registros prepandemia. Allí, el público se repartió casi de forma equilibrada: 55,6% extranjeros y 44,4% nacionales.
Por su parte, el Parque Arqueológico de Moray sumó 598.881 visitas, marcando un aumento del 11,5% respecto a 2024 y posicionándose 41,1% por encima de los niveles de 2019, consolidándose como uno de los puntos más activos del Valle Sagrado. Meanwhile, las Islas Ballestas también mostraron una evolución positiva, con 454.329 turistas, un crecimiento del 4,6% interanual, de los cuales 282.857 fueron nacionales y 171.472 extranjeros.
Desde Mincetur subrayaron que estos números reflejan una recuperación integral del sector, que impulsa actividades vinculadas a los servicios, el comercio, el transporte y la generación de empleo. Además, remarcaron el compromiso de fortalecer la infraestructura turística y la coordinación entre niveles de gobierno para sostener esta tendencia.

En paralelo, Promperú informó que, entre enero y octubre de 2025, el país recibió 2.800.828 turistas internacionales, superando los 2.720.719 registrados en el mismo período de 2024, lo que confirma el crecimiento del 4,6% anual. A pesar de esta mejora, aún se está por debajo de los 3.665.659 visitantes extranjeros alcanzados en 2019.
Un dato alentador es el impacto económico: durante el segundo semestre de 2025, los ingresos por turismo crecieron un 11% en comparación con 2019, marcando un nuevo récord de divisas. Este incremento responde al mayor gasto promedio por turista, impulsado por viajeros que priorizan experiencias exclusivas, gastronomía de alto nivel y servicios personalizados.
Finalmente, las autoridades señalaron que el turismo peruano enfrenta desafíos relacionados con la conectividad aérea y las fluctuaciones por eventos puntuales, aunque destacaron el esfuerzo conjunto del sector público y privado para diversificar rutas, sumar nuevas aerolíneas internacionales y fortalecer la promoción en ferias y eventos, generando beneficios directos para las pequeñas y medianas empresas del sector y dinamizando la economía nacional.




